La rápida intervención de los vecinos junto a un amplio dispositivo de extinción ha sido clave para evitar que las llamas, avivadas por el viento, se acercaran al casco urbano. La Junta de Castilla y León mantiene la causa en investigación
Un incendio forestal declarado a las 16:38 horas de este lunes en el término municipal de Mieza, en pleno Parque Natural Arribes del Duero, ha sido controlado gracias a la rápida intervención de los vecinos y de los medios de extinción. El fuego, que se originó junto al camino de La Code, ha afectado a una superficie estimada de unas seis hectáreas de pasto y arbolado, pero la coordinada respuesta ha evitado que las llamas se acercaran al casco urbano.
El alcalde del municipio, Ismael García Carreto, ha atendido a LAS ARRIBES AL DIA para confirmar que la situación está encauzada. "Sí, ya está apagado, ahora está controlado, vamos a seguir vigilando", han sido sus palabras tras una primera intervención a este medio en la que apuntaba el control de las llamas. Ahora, su tono reflejaba un claro alivio tras la tensión inicial. El momento de mayor preocupación se vivió cuando el viento cambió de dirección. "He visto en la foto que han puesto de la junta del helicóptero que el aire tiraba hacia el pueblo", ha explicado el regidor.
La contención del avance del fuego ha sido posible gracias a la inmediatez de la respuesta. La columna de humo fue avistada casi al instante, lo que permitió una movilización ejemplar tanto de los habitantes como de los equipos profesionales. "Enseguida se ha avisado a la gente, rápido vino toda la gente del pueblo y ya llegaron todos los medios, lo cortaron bastante", ha destacado Ismael García Carreto.
Esta actuación impidió que el incendio cogiera fuerza y se extendiera sin control por el escarpado terreno de Las Arribes. "Si llegamos a esperar, se habría alargado más", ha sentenciado el alcalde, subrayando que al fuego "no se le dejó coger fuerza".
La operación de extinción, coordinada por la Junta de Castilla y León, ha movilizado un importante dispositivo. Según los datos oficiales y el testimonio del alcalde, el operativo ha contado con medios aéreos y terrestres. "Han estado dos helicópteros y una avioneta", ha relatado García Carreto, añadiendo que la llegada de vehículos era incesante: "venía gente y coches y coches".
El parte de la Junta de Castilla y León ha detallado la participación de tres agentes medioambientales, cuatro cuadrillas terrestres, tres autobombas y tres brigadas helitransportadas (ELIF/BRIF), además de los tres medios aéreos. Aunque el incendio evoluciona favorablemente, parte del dispositivo permanece en la zona para refrescar el terreno y evitar reproducciones.
A falta de una medición oficial, la primera estimación del alcalde sobre la superficie afectada es de unas seis o siete hectáreas. "Como unas seis hectáreas. Ha ido cogiendo direccion en fila hacia el pueblo", ha detallado. Afortunadamente, el fuego no ha afectado a infraestructuras importantes, aunque sí ha estado cerca de una caseta ubicada junto al camino, que finalmente ha podido ser salvada.
La vegetación calcinada ha sido principalmente "pasto y algún olivo en alguna parcela, algún almendro y algún roble", ha enumerado el alcalde. El fuego encontró combustible en zonas con bastante maleza, lo que avivó las llamas en puntos concretos.
La causa del incendio sigue siendo una incógnita y la Junta de Castilla y León lo mantiene en estado de "investigación". El propio alcalde ha preferido no especular sobre el origen. "No, no sabemos nada", ha afirmado con rotundidad. Por ahora, la prioridad es la completa extinción y vigilancia del perímetro. "Aquí sí que todavía toda la gente, porque he estado vigilando, por si acaso", ha concluido Ismael García Carreto.