La instalación correrá a cargo de una empresa, pudiendo acceder el Ayuntamiento al 25% de la energía producida y los vecinos de un radio de 2 km. a un 75%
Las cubiertas tanto del Pabellón de la Avenida Conde de Foxá como del Pabellón Eladio Jiménez se llenarán próximamente de placas solares (está previsto colocar 220 en cada una de las cubiertas), que permitirán rebajar la factura eléctrica del Ayuntamiento de Ciudad Rodrigo al que pertenecen los pabellones y la de los vecinos que quieran sumarse a este suministro, siempre que estén en un radio de dos kilómetros de distancia de las placas, pudiendo contratar un 75% de la energía generada por estas, con el consiguiente ahorro en la factura de la luz al ser más barata que diréctamente de la red eléctrica.
Como recordó en la mañana del miércoles el alcalde Marcos Iglesias, el Ayuntamiento llegó a tener el proyecto (de hecho se recogió en el Presupuesto Municipal para 2023 con un importe de 230.000€) de instalar placas por iniciativa propia en la cubierta del Pabellón Eladio Jiménez, para recoger energía que diera suministro a las instalaciones municipales. Sin embargo, esa idea se ha descartado, corriendo a cargo la instalación y gestión de las placas y de la energía que generen de una empresa.
En concreto, ha sido Iberdrola quién ha solicitado poder instalar placas en las cubiertas de los pabellones, pero el Ayuntamiento va a sacar a licitación la concesión del espacio (por un período de 15 años), pudiendo pujar otras empresas, aunque por haber hecho la solicitud, Iberdrola tendrá ‘derecho de tanteo’ (si es que la suya no es la oferta más alta).
Se lo quede la empresa que se lo quede, por cada kilowatio producido con las placas el Ayuntamiento recibirá un mínimo de 1,2€, haciéndose con el derecho a instalar las placas aquella empresa que ofrezca más dinero (en todo caso, el Consistorio recibirá al año un fijo de 2.880€).
Respecto a la energía producida con las placas, el Ayuntamiento tendrá derecho a ‘adquirir’ para el suministro de energía de sus edificios el 25% de la que se produzca, que se supone que tendrá un coste inferior al de la energía tradicional. En lo que respecta al otro 75% de la energía producida, podrán acceder a ella ciudadanos que vivan en un radio de 2 kilómetros en torno a cada Pabellón (cuando entren en funcionamiento se explicará cómo se podrá sumar la ciudadanía).
Marcos Iglesias y el delegado de Sostenibilidad Ambiental, Rubén Benito, resaltaron que el proyecto no tendrá ningún coste para el Ayuntamiento (si se hiciese por iniciativa propia, además de la instalación, habría que hacerse cargo el mantenimiento), además de darle una utilidad a cubiertas que están “inutilizadas”.