SENASA ha cedido este martes en su sede de Matacán (Salamanca) una histórica avioneta Bonanza F33A a la Fundación Infante de Orleans. La aeronave, que formó a generaciones de pilotos comerciales españoles desde 1974, pasará a formar parte del fondo histórico de la fundación para su recuperación y exhibición.
La historia de la aviación comercial española tiene desde hoy una pieza más a salvo del olvido. SENASA (Servicios y Estudios para la Navegación Aérea y la Seguridad Aeronáutica) ha cedido este martes una histórica avioneta Bonanza F33A a la Fundación Infante de Orleans (FIO). La aeronave, que durante décadas fue el pilar en la formación de pilotos en la base de Matacán (Salamanca), pasará a formar parte del catálogo histórico de la fundación para su recuperación y exhibición.
El acto de cesión se ha celebrado en el hangar de la sede de SENASA en Matacán, donde se ha hecho entrega simbólica de las llaves del avión. Andrés Arranz, Presidente y Consejero Delegado de la Sociedad, ha destacado el valor de la aeronave, afirmando que “para SENASA es una enorme satisfacción que esta aeronave encuentre un nuevo hogar en la FIO, una institución que admiramos por su labor en la preservación y divulgación del patrimonio aeronáutico español”. Arranz añadió que esta colaboración “refuerza esa vocación: compartir conocimiento, despertar vocaciones, y contribuir a una cultura aeronáutica sólida y accesible”.
El encuentro contó con la presencia de representantes de instituciones públicas y privadas, así como con el testimonio de dos pilotos veteranos, miembros de la primera promoción de la Escuela Nacional de Aeronáutica (ENA) que se formaron con este mismo modelo de avión, quienes compartieron anécdotas de sus años de formación.
La avioneta cedida, con matrícula EC-CLM, fue fabricada en 1974 en Wichita (Estados Unidos). Su viaje inaugural hasta España cubrió 8.200 kilómetros en 24 horas de vuelo con tres escalas. Concebida como avión de turismo, sus excelentes prestaciones permitieron adaptarla como aeronave de escuela, convirtiéndose en un emblema para la formación de pilotos en España. Estuvo en servicio hasta el año 2001, conservando todavía su configuración de colores original.
La importancia de esta cesión radica en que la mayoría de los pilotos veteranos de líneas aéreas que hoy culminan su carrera profesional iniciaron su formación en estas aeronaves en la ENA. La Bonanza F33A es, por tanto, un testigo histórico y un objeto de nostalgia para el mundo de la aviación española.
En la década de los 70, la creciente demanda de pilotos por parte de las aerolíneas llevó a la creación, en mayo de 1974, de la Escuela Nacional de Aeronáutica (ENA) en Matacán. Su propósito era ofrecer una formación civil subvencionada, a la que se accedía por oposición pública, utilizando los recursos de la escuela militar ya existente. El 15 de septiembre de 1979 se inauguró un nuevo edificio y la escuela llegó a contar con una flota de 50 aviones, incluyendo 25 Bonanzas F33A, consolidándose como un centro de prestigio mundial.
Entre 1974 y 1990, la ENA formó a 364 profesionales en 14 promociones. El 20 de diciembre de 1990, la escuela se privatizó por Real Decreto, dando origen a SENASA, que continuó con la formación de las dos últimas promociones públicas antes de que la formación pasara a ser privada. El relevo lo tomó posteriormente Adventia, creada en mayo de 2000.
Hoy, la sede de SENASA en Matacán sigue siendo un centro neurálgico para el sector. En sus instalaciones, con un hangar de 3.600 m² y un equipo de unos 30 profesionales, se realizan trabajos de mantenimiento y gestión de aeronavegabilidad para clientes como Adventia, el Ejército del Aire (para su flota C90) y el Servicio Aéreo de la Guardia Civil (para su flota Beechcraft B300).
Además, desde Salamanca se desarrolla el servicio de verificación de radioayudas para ENAIRE y se realizan consultorías sobre medios aéreos para el Ministerio de Transición Ecológica, la Comunidad de Madrid, la Xunta de Galicia y Salvamento Marítimo.
La Fundación Infante de Orleans (FIO), creada en 1989, es una organización sin ánimo de lucro dedicada a la recuperación y conservación del patrimonio aeronáutico español. Su misión es mantener en vuelo una colección de más de 40 aviones históricos, divulgando el conocimiento de la aviación en España mediante exhibiciones estáticas y en vuelo para el disfrute de profesionales y de toda la ciudadanía.