El espectáculo poético-musical 'Arcos y Ecos', impulsado por la Diputación de Salamanca, concluye su exitosa gira por 28 iglesias de la provincia.
La iglesia mudéjar de San Juan de Alba de Tormes se llenó de luz y emoción en la noche de ayer, miércoles. No fue el sol, sino la poesía, la música y la interpretación del espectáculo “Arcos y Ecos” lo que irradió desde el templo, inundando de sentimiento al inmenso público que abarrotó cada rincón para presenciar la penúltima función de su gira.
Durante casi una hora, la apasionante actuación y la melodiosa voz de Guadalupe Lancho, en perfecta amalgama con la música de Juan Francisco Vicente y Jenny Leyva, se adueñaron de los corazones de los presentes. El espectáculo, que parece tener "alas propias", mantuvo al público suspendido en el aire, estremeciendo incluso a aquellos que, formando ya un fiel club de fans, repetían la experiencia.
El éxito de esta iniciativa, impulsada por el Área de Cultura de la Diputación de Salamanca, ha sido posible gracias a la gran acogida de los ayuntamientos y la colaboración de las diócesis y los párrocos, que han abierto gustosos las puertas de las 28 iglesias mudéjares seleccionadas para la gira.
El proyecto ha logrado llevar una propuesta artística de alta calidad a la Salamanca rural, atrayendo no solo a los habitantes de cada pueblo visitado, sino también a un público foráneo que ha seguido el recital poético-musical por toda la provincia.
La exitosa y estremecedora gira de "Arcos y Ecos" culmina hoy, jueves 31 de julio. La última oportunidad para disfrutar de esta experiencia única será en la iglesia de La Asunción de Peñarandilla, donde la luz del arte volverá a brillar en la casa de Dios.