Tres de estos centros, pertenecientes a la Universidad de Salamanca y al CSIC, recibirán 425.000 euros cada uno para potenciar sus planes estratégicos y mejorar su posicionamiento nacional e internacional.
La Junta de Castilla y León ha aprobado una inversión de casi 3 millones de euros para impulsar la labor de siete unidades de investigación de excelencia en la comunidad, de las cuales tres tienen su sede en Salamanca. La medida, publicada este miércoles en el Boletín Oficial de Castilla y León (Bocyl), se enmarca en la convocatoria ‘Escalera de Excelencia’, diseñada para fortalecer el ecosistema científico regional.
Esta financiación, que asciende a un total de 2.975.000 euros, se distribuye en ayudas de 425.000 euros para cada una de las unidades beneficiarias. El objetivo es apoyar a aquellos centros que, a pesar de haber recibido ayudas previas de la Junta, no lograron acceder a los prestigiosos programas estatales ‘Centros de Excelencia Severo Ochoa’ y ‘Unidades de Excelencia María de Maeztu’.
Salamanca se posiciona como un polo clave en esta inversión, con tres unidades de investigación que recibirán un total de 1.275.000 euros. Estos centros pertenecen tanto a la Universidad de Salamanca (USAL) como al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). Las unidades beneficiarias son:
Además de los centros salmantinos, otras cuatro unidades de investigación, con sede en Valladolid, completan la lista de beneficiarios de esta línea de ayudas. Estas son:
Según detalla la Consejería de Educación, esta inyección económica permitirá a las unidades fortalecer sus capacidades de investigación, mejorar su liderazgo y posicionamiento a nivel nacional e internacional. La iniciativa forma parte de la Estrategia Regional de Investigación e Innovación para una Especialización Inteligente (RIS3) de Castilla y León 2021-2027 y cuenta con la cofinanciación del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER).
Con estas ayudas, la Junta busca no solo apoyar a los sectores económicos más competitivos de la región, sino también fomentar la transferencia de conocimiento y la atracción de talento, consolidando así la capacidad de la Comunidad para afrontar los retos de un escenario globalizado.