Se quejan de la falta de mantenimiento, los problemas de presión especialmente en zonas altas y cortes sin previo aviso
Los vecinos de Terradillos han vuelto a alzar la voz ante una situación que, lejos de ser novedosa, se ha convertido en una amarga constante cada periodo estival: la escasez de agua y los continuos cortes de suministro. La paciencia ha llegado a su límite y la frustración se ha apoderado de unos vecinos que se sienten desatendidos y que han visto cómo las promesas de soluciones se diluyen, especialmente en las zonas altas del municipio. La vida cotidiana se ha visto severamente alterada, con acciones tan básicas como ducharse convertidas en una odisea nocturna.
La problemática, según han relatado los afectados, no es un hecho aislado de este año, sino una "película" que se repite con la llegada del calor. "Todos los años, al principio del verano, es la misma película", ha lamentado un vecino, describiendo un ciclo de problemas que parece no tener fin y que ha puesto de manifiesto, una vez más, las carencias en la infraestructura y gestión del suministro hídrico en la localidad.
El origen del problema, según han explicado los residentes, parece radicar en una combinación de factores que se agravan con el aumento de la demanda en verano. "Desde el final debes de tener dos bombas, para dar más presión o menos presión", ha detallado un afectado. En invierno, la presión es suficiente, pero con la llegada del calor, "esa presión que viene el caudal que venga con esa presión ya no es suficiente. Entonces, hay que subir más".
Esta situación ha generado una profunda inquietud entre los habitantes, quienes han observado cómo, año tras año, las dificultades para acceder a un bien tan básico como el agua se han convertido en parte de su rutina estival. La sensación de impotencia crece al ver que las soluciones implementadas hasta ahora no han logrado atajar el problema de raíz.
Uno de los puntos más criticados por los vecinos ha sido la aparente falta de mantenimiento preventivo de las infraestructuras. "Falta mantenimiento de los depósitos", explican. Esta limpieza reactiva, en lugar de proactiva, ha llevado a que los filtros se obstruyan, impidiendo que el agua fluya con normalidad.
Las consecuencias falta de presión se han cebado especialmente con las zonas altas del pueblo. "En cuanto falta agua la parte de arriba del pueblo nos quedamos sin agua, sobre todo por las tardes", ha explicado un afectado. Esta situación ha convertido las tardes en un suplicio, impidiendo realizar tareas cotidianas.
La desesperación ha llegado a tal punto que ducharse se ha convertido en un lujo nocturno. "Hasta bien entrada la noche, a veces hasta las dos de la madrugada, no te puedes duchar", ha confesado un vecino. El motivo, según ha indicado, es que "la gente a lo mejor se pone a regar jardines o se pone a regar un poco los huertos cuando vienen por la tarde, pues ya hasta las doce de la noche no ves el agua".
Los vecinos critican que los cortes para realizar pruebas se realizan sin prevoi aviso. "Han andado haciendo pruebas, cortaron el agua de los de abajo. La han tenido cortada media mañana el agua de los de abajo sin avisar ni nada", ha denunciado un residente.
La situación en la zona de El Ventorro también ha sido preocupante, donde, según los testimonios, han llegado a estar "sin agua, no sé si un día o dos días". La solución que se baraja actualmente, según los vecinos, es "volver a cortar el agua por zonas, a ver qué pasa", una medida que genera más incertidumbre que tranquilidad.