Compartió salida en hombros con Emilio de Justo, que desorejó a un buen toro de Vellosino
Flojeó el de Capea desde los compases iniciales. Tomó tres puyazos entre las protestas del público por su escasa fuerza. Ni una tanda le duró a Morante pese a que intentó cuidarlo en todo momento. Se desplomó el de Capea y el cigarrero optó por poner fin a su primera faena.
Buen tercio de varas protagonizado por 'Palmeño', de Vellosino, en el caballo montado por Germán González. Anteriormente había protagonizado un buen saludo capotero Emilio de Justo toreando a la verónica. Brindó al público el torero extremeño, antes de comenzar por doblones de una gran torería. Pronto, repetidor, con emoción y transmisión el de Vellosino, frente al que Emilio de Justo firmó las mejores series toreando con la mano derecha en una labor de más a menos. Lo mejor fueron los pases de pecho pasándose todo el toro por delante. Mató de estocada trasera pero efectiva y cortó las dos orejas. Gran ovación para el toro de Vellosino en el arrastre.
Hubo emoción en el galleo de Sergio Rodríguez para poner al tercero, de El Torero, al caballo montado por Héctor Piña, donde tomó tres varas importantes. En el último envite se arrancó desde media plaza. Brindó Rodríguez a Morante de la Puebla antes de un comienzo toreando de rodillas de mucha exposición en las rayas del tercio. Muy firme y poderoso el torero abulense, firmando series con ajuste y que tuvieron eco en el tendido gracias a su buen trazo, gustándose por momentos. El astado no paró de embestir hasta el final. El epílogo tuvo mucho sabor y torería. Solo hubo un borrón en la comprometida actuación de Sergio Rodríguez, la espada se fue a los bajos de muy fea manera, esfumándose un triunfo rotundo ganado a ley.
El recibo capotero de Morante al cuarto, de Garcigrande, fue sublime. Una verónica por el pitón derecho fue a cámara lenta y la media en el centro del ruedo, soberbia. Sensacional toro de Garcigrande, con prontitud, calidad y profundidad en su embestida. Solo tomó dos puyazos 'Congresista' en varas pero en la muleta de Morante fue un derroche de virtudes. El toreo al natural fue de escándalo. El de Garcigrande con el hocico por el albero, con suma calidad en el viaje y saliéndose de los vuelos. Morante entregado, sublime, a ralentí. La estocada fue de libro y el sevillano cortó las dos orejas.
Muy bien presentado el quinto, de José Enrique Fraile de Valdefresno, que se quedó corto en el capote de Emilio de Justo. Muy noble y con cierta calidad el astado salmantino, con el que Emilio de Justo dejó pasajes aislados en una faena en la que faltó emoción.
Con verónicas a pies juntos y chicuelinas saludó Sergio Rodríguez al sexto, un toro de Valdellán muy bien presentado. Brindó al público el espada abulense antes de elaborar una faena acertada y con pulso. Entendió bien al de Valdellán, que pedía todo sin obligarle y en linea recta. Importante dimensión de Rodríguez, que se volvió a atascar con la espada.
Plaza de toros de Ávila. Tres cuartos de entrada en tarde veraniega. Corrida concurso de ganaderías (Capea, Vellosino, El Torero, Garcigrande, José Enrique Fraile de Valdefresno y Valdellán). El primero, de Capea, muy flojo. El segundo, de Vellosino, bravo, repetidor y con emoción, ovacionado en el arrastre. El de El Torero con duración y transmisión, ovacionado. El cuarto, de Garcigrande, extraordinario, con profundidad en su embestida y un grandioso pitón izquierdo, ovacionado en el arrastre. El quinto, de José Enrique Fraile de Valdefresno, noble pero sin emoción. El sexto, se Valdellán, noble.
Morante de la Puebla, de gris perla y oro. Silencio y dos orejas.
Emilio de Justo, de caña y oro. Dos orejas y ovación.
Sergio Rodríguez, de nazareno y oro. Oreja y ovación tras petición.
Premios
Mejor picador. Manuel Quinta
Mejor lidiador. Juan José Domínguez
Mejor toro. 'Empalado', de El Torero