El salmantino despide su etapa como novillero con un faenón en Madrid en su encerrona en solitario. Solo la espada y un sector del público no quisieron la 'foto' del triunfo
Expectación desbordada en Las Ventas para ver a Marco Pérez. Ni una entrada en taquillas para ver la encerrona del salmantino en su despedida como novillero. Solo uno de los seis novillos lidiados ofreció verdaderas opciones de triunfo a un Marco Pérez que no se dejó nada dentro. Lo intentó todo el charro en una tarde de máxima exigencia, y también de intransigencia por parte de un sector del público que su único objetivo fue reventar la tarde. Solo la espada se interpuso en el camino de MP y una foto triunfal que tendrá que esperar. Su faena al quinto de la tarde, un buen novillo de Fuente Ymbro, fue de entrega absoluta, de una verdad impresionante y de demostrar el por qué está llamado a ser alguien importante en este mundo. Hay que tener paciencia, porque llegará...
'Corremantas', que hizo primero de la tarde, fue protestado de salida por un sector del tendido por su presentación. Lo fijó Marco Pérez en el capote, con solvencia, antes de que el de El Freixo apretase en la primera vara en el caballo de Antonio Muñoz. Milagroso el quite de Prestel a Vicente Herrera en banderillas cuando estaba a punto de ser alcanzado por el astado tras dejar un par de banderillas. Brindó Marco Pérez al cielo su primera faena, que comenzó toreando rodilla en tierra para sacar al novillo fuera de las rayas. Ahí robó muletazos de mucho mérito el salmantino por el pitón derecho. Noble el novillo, pero con escasa fortaleza y sin ninguna opción por el lado izquierdo. La última serie con la derecha tuvo mérito, con un torero totalmente entregado. Mató al cuarto envite y fue silenciado.
Cuatro buenas verónicas y dos medias con sabor dejó Marco Pérez al segundo de función, que derribó de forma estrepitosa en dos ocasiones al caballo de picar montado por Alberto Sandoval. Al tercer encuentro recetó un gran puyazo el varilarguero charro. Tuvo movilidad y codicia el de Fuente Ymbro y Marco Pérez en el inicio de faena, lo que aprovechó el espada para firmar series notables por el pitón derecho. Embraguetado, con ajuste y determinación el salmantino, que en un pase de pecho mirando al tendido arrancó la primera gran ovación de la tarde. Por el izquierdo le costó más al astado tomar la muleta, por lo que Marcó volvió a la mano derecha con el novillo ya con una marcha menos. El final por manoletinas y uno de la firma tuvieron torería. Mató de gran estocada al tercer intento.
Protestado de salida también el tercero, muy escurrido y sin remate. La lidia durante el tercio de varas fue caótica, tomando el novillo tres puyazos. Se fue a los medios Marco Pérez para quitar por chicuelinas con el de Fuente Ymbro saliendo muy desentendido del capote. Brillante Iván García con las banderillas, saludando montera en mano tras el tercio. Brindó MP al público, comenzando su faena de muleta citando de largo. A punto estuvo el de Fuente Ymbro de echárselo a los lomos en el segundo muletazo. Muy peligroso y con sentido el novillo, quedándose muy corto en su viaje. Se la jugó el novillero en una labor a cara de perro en la que fue imposible obtener lucimiento. Optó por abreviar Marco.
A la puerta de chiqueros se fue Marco Pérez para recibir al cuarto en un envite muy comprometido del que salió airoso. Muy suelto y sin fijeza el de El Freixo, que amagó en varias ocasiones con saltar al callejón. Vistoso el galleo para sacar al novillo del caballo de picar, pese a la escasa entrega del astado. Muchas complicaciones en banderillas para Curro Robles y Vicente Herrera, con el de El Freixo echando siempre la cara arriba en el encuentro. Brindó a su padre Marco Pérez antes de comenzar por estatuarios. Hubo un pase de la firma que fue un cartel de toros. Apostó el charro dejándosela muy puesta para aprovechar la transmisión de 'Morisqueto' en la muleta. Hubo ligazón, limpieza y ajuste en las series a derechas. Al natural bajó el diapasón de la faena, con el novillo muy aplomado por ese pitón izquierdo. Ahí se acabó el novillo de El Freixo y a MP no le quedó otra opción que meterse en terrenos de cercanías para robar muletazos de mucho mérito. El arrimón fue de órdago pero un sector del público se encargó de que aquello no tuviese el eco acorde a la exposición y esfuerzo de Marco. El espadazo final con el torero volcado sobre el morillo del animal fue letal. Hubo petición de oreja pero todo quedó en saludos tras aviso.
Otra vez a porta gayola fue Marco Pérez a recibir al quinto, de Fuente Ymbro. Tras la larga cambiada, la plaza bramó con un ramillete de lances con mucho gusto. El quite por gaoneras tras el tercio de varas fue mayúsculo y de una quietud impresionante, con Marco atornillado en el albero venteño. A los medios se fue el salmantino para brindar al público. El comienzo de su faena fue de una emoción bárbara, poniendo la plaza en pie tras dos cambiados por la espalda a los que siguieron varios muletazos de gran temple y torería. Buen novillo de Fuente Ymbro con el que MP, por fin, se pudo romper a torear. Al natural se la dejó siempre alante para enganchar y torear con ligazón. En el remate de una serie voló por los aires MP, que sin mirarse se repuso para volver a torear con la izquierda con verdad y absoluta entrega. Cuando toreaba abandonado, volvió a ser volteado de manera muy fea. La plaza en pie. Un clamor. Por la derecha el torero para firmar series emocionantes, en un constante toma y daca con 'Boquiflojo'. El epílogo por trincheras tuvo mucha torería. A la obra solo le faltó la firma con la espada.
'Comino' fue el cierraplaza, y no dudó MP en irse por tercera vez consecutiva a la puerta de toriles en medio de una gran ovación. Se le quedó parado a tres metros el de El Freixo y tuvo que desistir el novillero en un momento de apuro. Por delantales toreó el charro, con un temple exquisito. Buen puyazo de José María González. Bien también Rubén Blázquez con las banderillas. Brindó MP su último novillo de la tarde a José Ramón Martín. Se puso de rodillas en los medios el salmantino, poniendo toda la carne en el asador, pero el de El Freixo se quedaba muy corto ya desde los primeros muletazos, echando siempre la cara arriba al final del viaje y desluciendo mucho la labor de Marco. Por el lado izquierdo la tomó con más recorrido el de El Juli, aunque le faltó emoción y calidad en su embestida. Le apretó el novillero buscándole las vueltas, robando algún natural con calidad y largura en una labor que nunca pudo tomar vuelo.
Plaza de toros de Las Ventas (Madrid). Lleno de 'No hay billetes'. Novillos de El Freixo (1°, 4° y 6°) y Fuente Ymbro (2°, 3° y 5°). El primero noble pero sin transmisión. Segundo con movilidad por el pitón derecho pero con poco fondo, aplaudido en el arrastre; el tercero incierto y peligroso, el cuarto duró poco, el quinto bueno, con duración y transmisión; el sexto noble pero sin calidad ni transmisión.
Marco Pérez, en solitario, de grana y oro: silencio, silencio, silencio, saludos tras petición, vuelta al ruedo y palmas de despedida.