El grupo “Proyectos Kalliope” dirigido por la poeta Elena Banegas, ha estrenado en Salamanca durante las últimas semanas, en varios centros culturales, una obra teatral titulada “ El diálogo de las diosas: Afrodita y Artemisa”. La obra es interesante y de mucha actualidad, por los dos motivos principales que la forman: primero, por el método utilizado, el diálogo entre dos puntos de vista diferentes, que poco a poco se van enriqueciendo, a través de este diálogo, y segundo por el objeto investigado en el encuentro de ambas diosas, la identidad femenina, representada en los dos polos que caracterizan a las dos dialogantes. Afrodita, diosa del amor, representa los aspectos emocionales, sensuales, intuitivos, maternos, del alma femenina y Artemisa, diosa de la caza y de la pesca, los aspectos más activos, emprendedores, independientes e intelectivos de la mujer.
El siempre complejo tema de la identidad femenina queda expuesto a través de la dualidad de estas dos diosas, que en la escena representan un encuentro dialogante, inteligente, respetuoso y fructífero como la filosofía griega concibe el diálogo. En el proceso de intercambio de ideas, se produce en ambas diosas la transformación de su propia imagen a través de la escucha de la palabra de la otra, de tal modo que Afrodita descubre sus propios aspectos ocultos característicos de Artemisa, y Artemisa conecta con sus aspectos soterrados propios de Afrodita. Esta valoración del DIÁLOGO del que tan necesitado está nuestro actual mundo, tenso, encerrado en el individualismo y casi sordo, es una de las múltiples enseñanzas de esta pequeña joya teatral.
Pero no solo la enseñanza de la necesidad del diálogo entre los distintos puntos de vista de una misma realidad, la naturaleza femenina, impregna esta obra, sino la labor de síntesis de partes opuestas que nos muestra, resulta muy útil para unificar algunas polaridades que aún presenta el actual movimiento feminista. Por ejemplo la comprensión del fenómeno de los/las transexuales.
Aunque este diálogo entre Afrodita y Artemisa está encuadrado en la búsqueda de la femineidad, su lectura sugiere que la exploración de cómo el discurso cultural de cada sociedad condiciona la identidad femenina, puede y debe seguir con la identidad masculina, sujeta también a los vaivenes de los discursos dominantes.
La exploración de las polaridades que también existen en la identidad masculina, llevará a una síntesis más sana y útil colectivamente entre los aspectos masculinos y femeninos. Pues, como hace tiempo ya la Biología y la Psicología, entre otras ciencias, han descubierto, tanto las mujeres como los hombres poseen la dualidad femenino/ masculino en su constitución y modos de sentir.