Vivimos en una sociedad que va cada día más camino del fracaso. Se acaba la semana Santa con gran asistencia a las procesiones porque a falta de recursos para ir a la playa en algo hay que pasar el rato. Los ateos como los tontos que cogen la linde son un coñazo pues no para de hablar de Dios.
El gobierno no ha reducido el fracaso escolar, y menos desde Teruel, sino que hay modificado la ley para facilitar pasar de curso con asignaturas pendientes, a las que los alumnos ni se molestan en ir o estudiar, pues promocionan igual, disminuyendo el nivel educativo. El informe PISA indica que hemos empeorado en todas las áreas frente a los demás países de la UE: Resultado es que la atención publica en cualquier sitio de la administración va degradándose. En lo privado ya ni se sabe lo que pasa.
La desmemoria histórica, presente y futura se suma a todos los males. Leyendo a los pensadores y estadistas del pasado de nuestro país, vemos que sus predicciones están muy presentes. Somos un país empeñado en vivir de espaldas a su historia que es la más importante del mundo. La historia de España no es sólo la peninsular sino sumada a la de la España de América y la España de Europa. El marxismo se empeñó en empequeñecernos y nos lo hemos creído. Las proezas arquitectónicas y de infraestructuras, las esculturas obras de arte de América son sin duda españolas porque era también España. Los falsos independentistas americanos que hoy no serían más que terroristas al servicio de terceros, en este caso de Inglaterra que robó toda la riqueza de América y al remate EEUU acabó con Méjico y nuestras últimas provincias.
Humboldt escribió de la España de América que “no hay pueblo más feliz que el gobernado por España. Un obrero aquí gana entre cuatro o siete veces más que en Alemania”. Calvinista y enemigo de España no era sospechoso de mentir ni de sectarismo. La capital más lujosa del mundo era Méjico entre otras capitales de la España de América.
Así las cosas aquí perdido el honor, la vergüenza y el empuje de nuestros cercanos antepasados callamos ante tanta falta de honestidad de nuestra clase política. Parece que no importa nada como en la canción. Qué va a importar si las soluciones no se ven ya ni de cerca. Está todo podrido. La visita a China ha hecho que perdamos el contrato de Renfe en Texas de seis mil millones de euros, y una reprimenda que a ver con cuantos años la arreglamos.
Se extiende por Europa la idea de poner un impuesto a las mascotas, es como poner impuestos a los sentimientos, es como si pretendieran ahora sacrificar a millones de mascotas, muchos no lo podrán pagar, ya ni se paga al veterinario. No podemos renunciar a nuestras centrales nucleares pues necesitamos una fuente estratégica de energía de primer nivel. La energía nuclear es irrenunciable. La renovables son pan para hoy y hambre para mañana. Los campos de placas solares están a merced de las granizadas y de las grandes nevadas, los molinos a merced de viento. Al final son instalaciones que caducan, que hay que renovar y reciclar. Lo peor es que una granizada en un campo de placas solares provoca una contaminación del suelo por plomo y cadmio muy peligrosa que acaba en los acuíferos de la zona. Bueno al menos nosotros fuimos de la generación que iba a morir por la desaparición de la capa de ozono por culpa de los desodorantes. Nuestra aportación a la humanidad fue el desodorante de barra. Lo peor del mundo no son las malas personas sino los tontos porque son fácil presa de los malvados. Si juntas mil tontos con un malvado al final tienes mil un tontos. En la Comunidad de Madrid se lo van a tener que pensar si quieren volver a gobernar, el no declarar al Valle de los Caídos bien de interés cultura les va a pasar mucha factura. Están quedando como unos estafadores. No se puede tocar la Cruz y salir de rositas.
Un paso más contra nuestra industria del automóvil es que Bruselas va a prohibir el uso de fibra de carbono en los automóviles. Una verdad incomprensible es que Marruecos tiene unos sueldos en el sector de la construcción y servicios más elevados que en España, con un coste de vida cinco veces menor, tienen seguridad social y guarderías gratis. Allí serían más ricos pero trabajando, aquí reciben ayudas sin trabajar y además contribuyen a islamizar todo lo que tocan.
Lo peor es que no se salva ni la lotería de Navidad se cantan números que después no están en las listas en vivo, en directo, en tv y con notario y aun así hacen trampas. Luego a saber a quién se les anotan los otros.
El mundo está en estado de shock el dueño del local y sus camareros han decidido dejar de servir gratis. Durante décadas los EEUU han comprado a todos, han sostenido déficits colosales y han mantenido la economía global mientras otros disfrutaban de las comodidades de exportar sin restricciones. Ahora se propone la reciprocidad y los parásitos geoeconómicos se desesperan.
Sorprende ver a tanta gente alarmarse por la situación económica de otros países que están mejor que nosotros. Lo hacen con la ingenua idea de que aun estamos a tiempo de no acabar como ellos, cuando en muchos aspectos estamos ya mucho peor. España murió cuando se alardeaba de viajes de vacaciones financiados, piso con terraza y coche de gama media que ahora no son capaces de comprar ni una tostadora sin financiarla a doce meses. Algunos ya financian de nuevo a tres meses la cesta de la compra. Un país en que la clase trabajadora de Madrid y Barcelona, los de provincias nos aguantamos, no pueden pagarse el transporte público sin ayudas del Estado creo que es para darse cuenta de como estamos. En las noticias que si la lluvia de las procesiones, en las playas o las malas noticias del Madrid. Nada nuevo. En España nunca se ha gastado tanto, porque se invierte cuando lo que se gasta sirve para algo, se derrocha cuando el gasto no sirve para nada. Tampoco dejan vivir, trabajar ni crear empresas. Para algunos lo peor es que ya no encuentran chandal de pata ancha para ir el domingo a por los churros y se tienen que conformar con el tobillero de futbolista caro que no come cocido y el de ir a por cobre. Un desastre. Con lo de los aranceles de China algunos no encontraran ni las chanclas.