Cuando se despierta
el burro Perico
primero de todo
se lava el hocico.
Después desayuna
un zumo muy rico,
un poco de aceite
y un rabanito.
Si tiene calores
coge el abanico,
muy lleno de flores,
con un pajarito
que tiene un gusano
en medio del pico.
Cuando se va al pueblo
por un caminito
se encuentra muy pronto
con sus amiguitos.
-¡Hola!-, les saluda,
también al lorito,
que se llama Óscar
y es medio rubito.
Empiezan los juegos,
también un partido.
Acaban cansados
y se han divertido.
Como tienen hambre,
comen bocadillos,
unos cacahuetes
y espárragos fritos.
Y cuando termina,
el burro Perico
se deja muy limpio,
muy limpio el hocico.
Mercedes Sánchez