La rapidez y el avance tecnológico pueden deteriorar la cercanía en la atención sanitaria, pero iniciativas como humanizAS recuerdan la trascendencia del factor humano en el cuidado de la salud
En un mundo en el que cada vez somos más máquinas y menos personas, la palabra ‘humanizar’ cobra más sentido que nunca. Ese ha sido el objetivo del proyecto de innovación docente ‘Humanizando la Atención Sanitaria’ (humanizAS), obra de nuestros vecinos de la Universidad de Valladolid. Coordinado por los profesores Natalia Jimeno Bulnes y Álvaro Diéz Revuelta, este programa ha buscado algo que debería ser una obviedad, pero que no lo es: que los futuros profesionales sanitarios no vean la humanización como un complemento, sino como el eje mismo de la práctica clínica.
A través de la actividad "Entrevista a un profesional sanitario", estudiantes de Medicina, Logopedia, Nutrición Humana y Dietética y Enfermería se han sentado cara a cara con profesionales del sector para conocer qué hay más allá de la teoría.
Durante el curso 2023-24, un total de 307 estudiantes dialogaron con 92 profesionales sanitarios. Más allá de la cantidad de entrevistas realizadas, lo realmente significativo fue el impacto generado: los futuros sanitarios pudieron conocer de primera mano la realidad de la profesión, mientras que los expertos encontraron en esta interacción una forma de compartir su trayectoria y conocimientos con la próxima generación.
Los resultados de esta iniciativa hablan por sí solos. La gran mayoría de los estudiantes coincidió en que la experiencia presencial marcó una diferencia notable en la calidad del aprendizaje. También brindaron un dato especialmente revelador: el 96% de los profesionales manifestó su disposición a repetir la experiencia en futuras ediciones. Unos resultados que llevaron al proyecto a ser finalista al Premio Diagnóstico a la Mejor Iniciativa de Humanización, promovido por CyLTV.
La rapidez y el avance tecnológico pueden deteriorar la cercanía en la atención sanitaria, pero iniciativas como humanizAS recuerdan la trascendencia del factor humano en el cuidado de la salud. Al final, convertir la humanización en la norma y no en un privilegio se logra con proyectos como este. Y no hay más.