Soledad Gómez, presidenta de ASECOV, explica la situación actual que vive el comercio local cuando llegan estas promociones y asegura que hay “capacidad” para afrontar todos los retos
Un año más llega el esperado por los consumidores Black Friday. Cada consumidor se gastará una media de 242 euros en el Black Friday de 2024 según un estudio de Aladinia.com. El mismo informe desvela que ocho de cada diez españoles aprovecharán el Black Friday para anticipar las compras de regalos de Navidad, comprando una media de cinco productos y gastando 15 euros más que el año pasado. Unas promociones que también llegan al comercio local de Salamanca.
En este sentido, Soledad Gómez, presidenta de ASECOV, asegura que el comercio local de Salamanca se encuentra con muchos “altibajos”, algo que lleva ocurriendo varios meses. “Estamos teniendo muchos altibajos, estamos a la espera de si sale el nuevo horario para trabajadores y deseando sobre todo que lleguen las navidades porque ahora empieza la temporada fuerte”.
“Con el Black Friday desde que se empezó a poner como una promoción, aunque online, el comercio físico también se ha hecho eco de este tipo de promociones porque no podemos quedar atrás en ningún tipo de venta. Es un poquito el pistoletazo de salida para esa campaña navideña”, añade.
Con las ofertas que muchos comercios ofrecen por el Black Friday, se encadena dentro de unas semanas con el inicio de la campaña navideña. “Una campaña que afrontamos con optimismo ya que esperamos un aumento de ventas con respecto al año pasado”, añade.
“Generalmente la campaña navideña empieza a reflotar esas ventas y, bueno, pues, que vaya todo genial este año y se superen esas expectativas del año pasado”. Y frente a las grandes superficies su valor diferencial es clave: la atención personalizada.
“Si vas al pequeño comercio, siempre vas a tener a alguien con quien hablar, alguien que te recomiende, alguien que te reciba con una sonrisa, que te dé facilidades, siempre vas a tener esa cercanía”, explica Soledad. “Seguramente será una persona a la que veas a menudo, con quien te resulte más fácil hablar y, bueno, ya si tienes que hacer cualquier cambio, es muchísimo más sencillo acercarte a esa tienda”.
Frente a los restos que tiene el sector destaca la estabilidad. “Algo que vendría bien a todos es la estabilidad económica y política. Y también problemáticas siempre se van dando. El caso es que las vayamos afrontando poco a poco y el comercio de Salamanca tiene capacidad más que de sobra para afrontarlo”, concluye.