Con una inversión total de 150 millones de euros., este proyecto está dirigido especialmente a menores de 36 años
El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, ha anunciado una importante iniciativa que contempla la construcción de 1.000 viviendas públicas en el medio rural, con una inversión total de 150 millones de euros. Este proyecto está dirigido especialmente a jóvenes menores de 36 años, quienes podrán beneficiarse de una bonificación del 20% en la compra de estas viviendas, coste que será asumido en partes iguales por la Junta y las nueve diputaciones provinciales, con un total estimado de casi 30 millones de euros.
Además de las viviendas en propiedad, el Gobierno autonómico también ofrecerá 88 nuevas viviendas en régimen de alquiler social a través del programa Rehabitare, con un presupuesto de 9 millones de euros. Este esfuerzo busca no solo facilitar la emancipación de los jóvenes, sino también contribuir al desarrollo de sus proyectos de vida en Castilla y León.
Fernández Mañueco ha destacado la importancia de estas medidas como parte de una política de vivienda activa y útil, que busca fijar población y garantizar que las personas mayores puedan continuar residiendo en sus hogares. Esta iniciativa se suma a otras ya en marcha, como ayudas directas al alquiler y beneficios fiscales, que benefician a más de 18.000 familias en la región.
Con estos esfuerzos, Castilla y León se posiciona para crear un amplio parque público de vivienda, que servirá a las necesidades de los jóvenes y las familias más vulnerables, reforzando así su compromiso con el medio rural y la colaboración interadministrativa.