La hereda al trono ha ealziado su primer viaje al extranjero sola
Primer viaje oficial en solitario de la Princesa Leonor, que este viernes ha visitado Portugal confirmando su protagonismo institucional cada vez mayor a nivel internacional. Deslumbrante con un elegante traje rojo -un color muy 'español' y el favorito de su madre, la Reina Letizia- la heredera al trono cogía el vuelo rumbo al país vecino a las 10:30 horas de esta mañana en el Pabellón de Estado del aeropuerto de Adolfo Suárez Madrid Barajas.
A las 12:00 (11:00 hora local), Leonor aterrizaba en el aeropuerto militar Figo Maduro de Lisboa acompañada por el Ministro de Exteriores, José Manuel Albares, donde ha tenido un recibimiento digno de una reina en su primer viaje al extranjero, puesto que aunque no estaba previsto el Presidente de la República de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa, la ha recibido personalmente. Además, demostrando la importancia que el país vecino ha dado a su visita, la ha condecorado con la Gran Cruz de la Orden de Cristo, una distinción que se confiere a funcionarios y altos cargos por su servicio a Portugal y que en contadas ocasiones se otorga a mandatarios extranjeros.
Con una sonrisa en todo momento, la Princesa de Asturias ha visitado en primer lugar el Monasterio de los Jerónimos. Allí ha realizado una ofrenda floral depositando una corona en su nombre ante la tumba de Luis Camoes, considerado como el poeta en lengua portuguesa más ilustre, y ha tenido ocasión de realizar una breve visita por su basílica y por su claustro maravillándose con la belleza de uno de los monumentos arquitectónicos más emblemáticos de Lisboa.
A continuación, Leonor ha sido recibida con honores por el presidente luso en su residencia oficial, el Palacio de Belem, donde ambos han pasado revista a la guardia apostada para recibir a la heredera, y también en el breve acto por el que le ha impuesto la Gran Cruz de la Orden de Cristo, un reconocimiento que ya recibió Felipe VI en su primera visita oficial al país en octubre de 1988, siendo Príncipe de Asturias.
Una jornada muy especial que ha proseguido con un almuerzo en el que, haciendo un brindis por la buena relación que mantienen España y Portugal, la princesa ha dado un discurso incluyendo algunas partes en portugués. Con soltura y seguridad, Leonor ha confesado que "aquí me siento como en casa" y ha resaltado el "respeto profundo" que existe entre ambos países, a los que ha definido como "hermanos" más que vecinos.
La heredera del trono ha reconocido que este es un viaje que "esperaba con muchas ganas" y que le hace "muy feliz" y ha aprovechado el brindis para agradecer a Rebelo de Sousa "la hospitalidad y el inmenso cariño" con los que le han recibido. "No puedo negar lo especial que es para mí estar hoy aquí" ha expresado, recordando que Portugal fue precisamente el primer país que visitaron sus padres ya como Reyes hace diez años.
Al término del almuerzo, Leonor se desplazará al Oceanário de Lisboa, donde también está previsto que la acompañe el presidente luso. Aquí, además de realizar una breve visita de las instalaciones, participará en una mesa redonda con jóvenes científicos, puesto que el motivo de su viaje es "visibilizar la protección del medio ambiente y la conservación de los océanos, temas prioritarios para Portugal y España". Un encuentro con el que pondrá el broche de oro a su visita, que concluirá en torno a las 18:15 horas cuando cogerá el vuelo que la traerá de regreso a España.