Se ha estipulado que en Salamanca se considerará esta situación cuando se superen lo 35’5 grados
En un mes arranca el verano, una estación que este año se pronostica más caluroso y seca de lo normal. Tal es el punto, que ya se conoce que a partir de los 35’5 grados se considerará que hay una ola de calor peligrosa en Salamanca.
Así se determina en el Plan Nacional de Acciones Preventivas de los Efectos del Exceso de Temperaturas sobre la salud, que lo aumenta en casi medio grado del pasado año a este. Aunque el umbral es variable, se ha cifrado esta temperatura debido al calor extremo que se espera.
Por ello, ya se han difundido algunas recomendaciones para evitar, en la medida de lo posible, estas situaciones de riesgo.
Su objetivo, junto con los avisos y los diferentes niveles de riesgo ( nivel 0 (verde), de ausencia de riesgo, nivel 1 (amarillo), de bajo riesgo, nivel 2 (naranja), de riesgo medio y nivel 3 (rojo), de alto riesgo), sirven para determinar las medidas sociales que se han de tomar, y que pueden llegar ir desde la suspensión de los trabajos al aire libre en las horas más calurosas hasta otras prohibiciones.
Además, este año hay una novedad: además de este umbral por provincias, también lo habrá por zonas dentro de una misma provincia. En Salamanca prácticamente es igual en todo el territorio, excepto en la Sierra de Béjar y en la Sierra de Francia que es algo inferior.
El Ministerio de Sanidad facilitará a diario las predicciones de temperaturas máximas elaboradas por la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).
También facilitará los niveles de riesgo sanitario por altas temperaturas, que se recibirán en el correo electrónico y en el móvil a partir del 3 de junio.