"Si tuviera que vivir de nuevo mi vida, me impondría la obligación de leer algo de poesía y escuchar algo de musica por lo menos una vez a la semana" (Charles Dawin)
El día del libro, sirve para reseñar un homenaje al mismo, tal como ocurre con otros señalados días un tanto especiales, como el del trabajo, el de la madre, o este mismo de la Comunidad etcétera, pero no puede servirnos de disculpa para que sea el único día en que reivindiquemos y honremos a nuestros autores, libreros, y escritores, y por otro lado es de aplaudir, que al menos un día cada año nos acordemos de todos ellos y también lo bueno que es leer, aprender, entretenerse, disfrutar, y llenar el alma de sensaciones plenas.
Que la cultura se grave con el IVA, me parece una aberración, un sinsentido bochornoso, una montaraz falta de sensibilidad y vergüenza. Y esto sucede en un país donde se están cerrando librerías, ateneos, bibliotecas y donde la inclinación a la lectura tampoco es para sentirnos dichosos, más aun; nuestros jóvenes, son suspendidos en esta asignatura de vital trascendencia para la formación de su cuerpo mente y espíritu.
Parece increíble, que una nación de escritores, los más laureados del mundo, donde sus libros han sido traducidos a todos los idiomas cultos del Universo y sus Universidades, lamentablemente no sacamos provecho de ello, incluso, no es de extrañar que, ni se conozcan. Es tan grande la falta de estímulos, de ánimo de disposición creativa, de hábitos a la iniciativa de la lectura “que así nos va”. Pero ahora lo importante es rescatar al libro y al lector.
Leer es muy importante, es una frase trillada que escuchamos de manera continua por todos lados, desde la escuela, la casa y hasta en la televisión. ¿Por qué es importante leer?
Al leer activamos los distintos mecanismos y zonas cerebrales relacionadas con el razonamiento, la argumentación, la creatividad, la imaginación y la memoria, al hacerlo mantenemos nuestro cerebro ocupado y en buen estado.
Asimismo, la lectura es una fuente inagotable de conocimiento y aprendizaje. El leer nos permite conocer y comprender mejor el mundo en el que nos desenvolvemos e interactuamos con nuestros semejantes. Además, el proceso de lectura refuerza y desarrolla otras tareas del aprendizaje, por ejemplo, la ortografía, la redacción y el vocabulario. Quién lee de manera recurrente disminuye sus faltas ortográficas, es capaz de articular y expresar mejor sus ideas, ya sea de manera oral o escrita; sin contar que amplía su vocabulario, adoptando nuevas palabras a su glosario personal.
Cuando leemos obtenemos no sólo herramientas para el aprendizaje y el conocimiento, también nos permite generar capacidades y habilidades para relacionarnos con las demás personas. La lectura nos brinda la posibilidad de obtener valores y hábitos como el respeto, la tolerancia, la justicia y la igualdad. Principios que facilitan al ser humano relacionarse con sus semejantes de una manera sencilla, generando relaciones sociales amables y duraderas.
Por si fuera poco el proceso de lectura constituye una actividad divertida y entretenida, una sana manera de divertirse, de gozar y disfrutar de la compañía de un buen texto, mientras se transporta al mágico mundo del saber y del conocimiento.
Los mencionadas anteriormente son algunos de las muchos beneficios que produce el tener el hábito de la lectura, sin contar claro, con el placer y disfrute que significa el tener un libro entre tus manos, hojearlo y navegar entre sus líneas y párrafos, imaginando, descubriendo y aprendiendo nuevos conocimientos, nuevos mundos y nuevas personas. Como bien se ha demostrado a través de los tiempos, la terapia que supone para muchas personas, que aunque de vocación tardía en la lectura cuando descubrieron está y se aferraron a las emociones que suscitaban las páginas del libro, del cual ya no podía sustraer la atención. No considero que nadie pueda ser mejor o peor persona por el hecho de que unos lean y otros no. Pero es evidente, que las formas refinadas, del lenguaje, la atención el comprender y sentir el estado de ánimo, así como la formación de una opinión o el sosiego y seguridad interior que te produce el saber darle forma a la conversación a las palabras, en definitiva el poder estar y participar, ensancha el espíritu. Por eso desde estas volanderas paginas les pido que lean, que animen a leer a los suyos, no perderán el tiempo, serán más felices. Y aquello que busquen lo encontraran… Todo está en los libros…Pueden comprobarlo.
Fermín González, salamancartvaldia.es, blog taurinerías