El amor más puro se promete en estos rincones delicados rebosantes de historia, paz y tranquilidad. Son símbolos de la ciudad que se encuentran fácilmente en las postales para turistas, y son las presentaciones arquitectónicas de los conventos especialmente disfrutables de noche, para besos robados y miradas excitantes
Una cita romántica en una ciudad monumental como es Salamanca le dará un carácter más elegante y fastuoso. Un paseo por sus muchos espacios de interés, llenos de magia y belleza, logrará crear un momento realmente íntimo e inolvidable. Pasear con una agradable compañía por alguno de los rincones románticos que ofrece, tiene la virtud de potenciar el sentimiento de amor y deseo entre las parejas.
Ya sea con una nueva amistad conocida a través de alguna de las webs de contactos disponibles en internet, o con la compañía con la que se ha decidido iniciar o continuar un proyecto de vida, las calles de Salamanca ofrecen estos lugares para fotografiar con la lente de la memoria y hacer de un momento vivido una eternidad en el recuerdo.
Estos que se presentan a continuación forman parte de esos lugares que descubrir y disfrutar de la mano de la persona amada en la ciudad de Salamanca.
Posiblemente, el rincón más novelesco de toda Salamanca. Se trata de un jardín realmente bucólico, de unos 2500 metros cuadrados, ubicado en el centro de la ciudad. Un espacio muy visitado en vísperas de San Valentín, lo que puede dar una idea del valor que le dan los salmantinos a este espacio verde de singular belleza. El jardín romántico por excelencia presenta una amplia variedad de plantas y flores, ideal para adentrarse en ella son las horas del atardecer y disfrutar de la puesta de sol.
Su nombre lo recibe por ser el lugar que el escritor Fernando de Rojas escogió como uno de los escenarios para formar parte de la popular obra tragicómica Calisto y Melibea, mantiene la esencia romántica de aquellos encuentros de los carismáticos personajes literarios, un parque de pequeñas dimensiones, pero cuidado con delicadeza y detalle que ofrece, además, una magnífica perspectiva del río, la Catedral de Salamanca y del puente romano.
Aunque sea un espacio urbano convertido en el centro de la vida social de los ciudadanos salmantinos en general, es un lugar que debe ser recorrido en pareja y mostrar el orgullo de ir acompañado de alguien especial. Y es que se trata de una plaza muy concurrida y popular, donde las miradas giran incesantemente de este monumento de estilo barroco a las personas que caminan de la mano.
La Plaza Mayor está declarada monumento histórico-artístico nacional, desde 1973, y es ideal para hacerse una foto para el recuerdo junto a la estatua de Torrente Ballester, en el café Novelty, o bajo la cita dedicada a Salamanca de la mano del mismísimo Miguel de Cervantes.
El actualmente Museo de Art Decó y Art Noveu es un palacete modernista en el que se puede apreciar en sus salones y dependencias una amplia variedad de fondos donados por D. Manuel Ramo Andrade, anticuario y excelente coleccionista. Un lugar para dar color a la cita y fascinarse con los objetos realmente únicos y preciosos que este museo guarda. Además, también será posible disfrutar de la contemplación de algunas joyas modernistas, como la gran vidriera emplomada que allí se expone, junto a una sorprendente colección de muñecas de vidrio, de bronce y de crisaelefantinas. Por si fuera poco, suele ser lugar de exposiciones temporales de artistas tan reconocidos como fueron Dalí, Miró y Picasso.
De reciente remodelación, la Plaza de los Leones se ha ganado muy pronto la consideración de nuevo rincón para el amor y las parejas. Un sitio romántico que apoya la belleza del Patio Chico, ideal para los primeros besos entre amantes nobeles. Sus vistas al crucero sur y al ábside de la Catedral Nueva y a la Torre del Gallo le suman carácter cultural. No se puede pasar por Salamanca y no sentarse en alguno de sus bancos rodeados de plantas y flores, sobre todo si se están recibiendo los primeros flechazos del amor.
Para aquellos que buscan rincones más solitarios y desconocidos, algo que los haga sentir misteriosos y ocultos, en la calle Peñuelas de San Blas se localiza un rincón especialmente destinado a ellos. Es de los más encantadores de la ciudad, gracias a unas vistas increíbles de la Catedral, la Clerecía y de la Universidad Pontificia, que al iluminarse presentan una vista en realidad inolvidable.
El amor más puro se promete en estos rincones delicados rebosantes de historia, paz y tranquilidad. Son símbolos de la ciudad que se encuentran fácilmente en las postales para turistas, y son las presentaciones arquitectónicas de los conventos especialmente disfrutables de noche, para besos robados y miradas excitantes.
Otros espacios que deben ser recorridos en amor y compañía de una cita son la calle Compañía (una de las más bonitas del mundo), el Puente Romano (Misticismo y belleza clásica) y la Cueva de Salamanca, junto a la torre del Marqués de Villena, lugares llenos de brujería para llevar a cabo amarres de amor y otros sortilegios.