El periodista Chema Díez ofrece su visión acerca de la falta de pegada que sufre Unionistas, lo que ha puesto en tela de juicio a la figura de Ponz
La felicidad del fútbol la otorgan los goles que marca tu equipo; parece una absoluta evidencia, pero es una de las cosas más reales que existe en el deporte rey.
Desde el inicio de la temporada, Unionistas CF ha vivido peleado con el gol, pero al contrario que en las últimas semanas, dejar su portería a cero le valía para sumar un empate o rentabilizar al máximo los escasos goles anotados.
Siete tantos en 13 partidos dejan al equipo de Dani Ponz como el tercer menos goleador del grupo, sólo por superando a Sestao River y Teruel, ambos en puestos de descenso a Segunda RFEF, además de mostrar una situación que ya se barruntaba desde el inicio de la pretemporada. Unionistas no tiene pegada arriba, casi ni balas de fogueo.
Un equipo que genera poco y lo que tiene no lo ‘envía a la cazuela’ está destinado a pelear por no caer a los puestos de descenso porque resulta imposible mantener una firmeza y una seguridad defensiva durante toda una temporada; el bajón en ese aspecto llega y, con él, el resultado de no ver la portería rival con la certeza de hacer daño.
Quizá los que hace sólo unos meses acuchillaban a Carlos de la Nava y pedían su salida del club se estén tirando ahora de los pelos… esto, como reflexión que viene mucho a colación del problema que vive el equipo.
14 puntos suma Unionistas en las trece jornadas disputadas hasta el momento, con sólo dos puntos sumados de los últimos 18 en juego, situación que ha dejado al equipo al borde de los puestos de peligro del Grupo 1 de Primera RFEF.
Fuenlabrada y Nàstic son las dos nuevas pruebas de fuego para el equipo de un Dani Ponz que ha pasado de reventar récords de victorias seguidas y partidos sin perder en Unionistas a mostrarse vulnerable en lo que a juego y resultados se refiere.
El fútbol es lo que tiene… un día piden la renovación de tu contrato y 10 partidos después ya están pidiendo tu cabeza. Sea como fuera, la responsabilidad de Dani Ponz está ahí porque es la cabeza visible sobre lo que ocurre dentro del terreno de juego. Y el equipo del Reina Sofía lleva muchas semanas sin hacer un buen papel.
Pero, ¿acaso nadie se ha parado a pensar que quizá esto es lo que hay? Imagino que desde la dirección deportiva estarán muy atentos a un mercado de invierno en el que Unionistas tiene que participar sí o sí para intentar que la falta alarmante de gol no le lleve hacia un camino que nadie quiere ni mirar de reojo, pero que es real.
En este deporte, donde hay gol, hay alegría… y donde no lo hay, huele a descenso.