UNIVERSIDAD
Actualizado 06/10/2023 13:43:56
César García

Acaba de publicar 'Historia de los microbios' y recomienda que "lean todo lo que puedan, nos hace más listos"

Charlar con un científico siempre es enriquecedor, pero si además es profesor y escritor, la conversación se hace mucho más interesante y entretenida. Es lo que me ha pasado con el salmantino Raúl Rivas, con el que compartí infancia en el entorno de la parroquia del Milagro de San José y que ahora, décadas después, es catedrático de Microbiología de la USAL y acaba de publicar el libro 'Historia de los microbios'. Con el fin de mantener el rigor que caracteriza a la ciencia usaré el 'usted' para el tratamiento del entrevistado.

Profesor, investigador y escritor. ¿De dónde saca el tiempo para tanta actividad?

No tengo una respuesta clara para esa pregunta, pero lo cierto es que soy una persona activa y que siempre intenta ser práctico y resolutivo, aunque esté sumido en numerosos asuntos de diversa índole. Por supuesto, ayuda que suelo ser bastante organizado y metódico y que procuro exprimir hasta el último minuto de cada día. El verano es una época muy productiva para todo tipo de tareas, incluida la escritura.

Sin duda, sus libros demuestran que la ciencia no es nada aburrida.

Es verdad que la ciencia es divertida y curiosa. No hay duda de que, además de útil, la ciencia es apasionante y que puede ser transmitida con un estilo ameno, para hacerla más atractiva a las personas ajenas al ámbito científico. Por eso es muy importante adecuar el lenguaje según el tipo de público al que va dirigida una determinada explicación.

¿Con qué disfruta más, con sus investigaciones diarias en el laboratorio o con la aventura de libros como este?

Con todo un poco. Me gusta combinar diferentes actividades para no caer en rutinas que desemboquen en desidia y falta de motivación. La investigación y la escritura son ámbitos complementarios a los que hay que unir mi labor docente en diferentes titulaciones universitarias. Disfruto con mi trabajo, ya sea con las actividades de investigación, docencia y transferencia, y algo menos con las de gestión. El hecho de escribir libros como este, además de ser gratificante y de que en parte resulta una válvula de escape a la vorágine diaria, va unido al compromiso personal que tengo con la divulgación científica y con la transmisión del conocimiento a la Sociedad.

¿Cuándo y porqué empezó a buscar las conexiones de la microbiología con la historia?

En realidad, no hay una fecha concreta, supongo que siempre ha estado ahí, de manera subyacente. A parte de la ciencia, me gustan muchas otras cuestiones como son la literatura, la historia, la pintura, la escultura, el deporte, el cine, los comics, la geografía, la música, etc. De leer, aquí y allá, sobre estos aspectos, lo más probable es que las fechas, los personajes, los lugares y un montón de datos más, se fueran poco a poco sedimentando en mi cabeza de forma inconsciente, hasta que un día decidí escribir algunas de esas historias que habían empezado a revolotear y que esperaban a que les diera forma.

¿Cuáles son sus fuentes, cómo saber que condiciones microbiológicas había hace siglos en distintas épocas?

Para mí, las fuentes de libros como este siempre deben estar vinculadas a la literatura científica contrastada y publicada en revistas o libros de prestigio revisados por expertos. Cuando desconozco algún dato o alguna cuestión concreta, consulto bibliografía específica, la estudio, analizo, relaciono e interpreto, dedico tiempo a estudiar, hasta encontrar lo que necesito y después traslado la información a un lenguaje sencillo y que sea fácil de digerir por el público general.

¿Es muy exagerado decir que habría que reescribir parte de la historia, después de sus aportaciones?

Sí, creo que es muy exagerado. Los libros que escribo aportan otro punto de vista, que complementan y enriquecen determinados momentos históricos. A medida que avanzamos en el conocimiento y tenemos nuevos datos, es más sencillo construir un relato que se aproxime de la forma más fiable posible a la realidad. Siempre intento aportar y construir, divirtiéndome con lo que hago.

Pero, por todo lo que cuenta, parece que la Microbiología tendría que formar parte de otros estudios, como los de Historia, por ejemplo.

En mi opinión, no debemos asumir que la historia es plana y discurre por una única avenida ancha y sin baches. Es imposible desligar la historia de otros ámbitos, como por ejemplo la política, el arte y por supuesto la ciencia. Las personas y los acontecimientos se entrelazan en el tiempo y en el espacio. Unos sucesos influyen en otros, facilitando desenlaces y consecuencias que han llegado hasta nuestros días. Por supuesto, la microbiología no es una excepción y es una muestra más de que la ciencia y las humanidades deben avanzar cogidas de la mano.

Algunos de los críticos destacan su maestría para hacer protagonistas a los microorganismos. ¿Seguro que lo suyo no eran las letras?

Tengo diferentes inquietudes, el arte y las humanidades están entre ellas. Siempre me ha gustado la literatura y podría haber tirado por ese camino, pero lo cierto es que desde muy pequeño tenía claro que quería estudiar a los animales y a las plantas. Debo ser bastante tozudo, porque con los años acabé matriculado en la facultad de Biología. Aun así, considero que las letras son fundamentales. La lectura, si es variada, es una herramienta muy poderosa porque nos ayuda a pensar y nos hace más libres. Permite que viajemos a otros mundos, que desarrollemos nuestras conexiones cerebrales, que aprendamos, que razonemos mejor y que seamos más críticos. En definitiva, leer nos hace más listos. Lean todo lo que puedan.

¿Podemos recomendar sus libros como atractivos para un lector cualquiera?

Por supuesto, están escritos para que sean aptos para cualquier persona de 13-14 años en adelante. No solo hay microbiología, están plagados de aventuras, anécdotas, y sucesos, porque he intentado introducir todas aquellas cuestiones que me atraen y que he comentado antes. En realidad, son una especie de amalgama, escrita en un tono ameno y fluido que está al alcance de cualquier persona.

Y para acabar no voy a ser original. ¿Cuál será su próximo proyecto literario, seguro que ya tiene algunas ideas?

Tengo un par de proyectos literarios terminados, muy distintos a los anteriores, y que espero que puedan aparecer en el año 2024 y que tengan tan buena acogida como los que ya han sido publicados. Además, en la actualidad estoy trabajando en la construcción de otro proyecto ilusionante. Siempre produce un entusiasmo tremendo y una gran satisfacción ver en las librerías y en las bibliotecas los libros que he escrito, porque significa que el público está interesado en saber qué es lo que quiero contar. Las librerías y las bibliotecas son oasis de felicidad. Es bueno visitarlas de forma frecuente.

Leer comentarios
  1. >SALAMANCArtv AL DÍA - Noticias de Salamanca
  2. >Universidad
  3. >"La ciencia y las humanidades deben avanzar de la mano", afirma este escritor, científico y profesor salmantino