Tras perder más de seis millones de usuarios por el Covid, el bus gana pasajeros y se acerca poco a poco a las cifras prepandemia, además estrena este 2023 novedades
Más de 35.100 viajes realizan los salmantinos de media al día en los autobuses urbanos de la capital, según los datos entre enero y junio de este año facilitados por el Ayuntamiento de Salamanca. Una cifra que, aunque parezca alta, aún no ha alcanzado los números anteriores a la pandemia del Covid-19, que provocó un descenso notable en el número de usuarios del bus, más de 6,6 millones menos.
Una caída del 48,71% en 2020 respecto a 2019 que va progresivamente recuperándose; lo hizo ya el año pasado y en el presente aún más, aunque aún está al 91,5 por ciento de lo que se viajaba en bus urbano en prepandemia, en el mes de junio, las cifras, sin embargo, se han aproximado. La normalización sanitaria (aunque las mascarillas en el transporte público han sido obligatorias hasta el pasado febrero) y las bonificaciones aplicadas por el Gobierno, compartidas con el Ayuntamiento, han supuesto un impulso para una recuperación de viajeros que ha sido lenta en un transporte público que es fundamental para lograr una movilidad sostenible; lo ideal sería no solo alcanzar las cifras prepandemia, sino superarlas.
El autobús urbano registró un total de 13.635.139 viajeros en el año 2019 (37.356 de media al día); una cifra que cayó a la mitad en 2020 por la pandemia, con 6.992.454 viajeros (19.157 al día). En 2021 se recuperó muy ligeramente hasta los 8.568.567 usuarios, pero ya durante 2022 subieron en unos dos millones más hasta alcanzar los 10.560.068 (28.931 al día), aunque son más de tres millones menos que en 2019. En el presente año, las cifras se acercan más a las de prepandemia: entre enero y junio ha habido 6.353.187 viajeros (35.100 de media al día) frente a los 6.939.862 del mismo periodo de 2019 y supera en un 18% al año pasado.
Una recuperación de viajeros que en 2023 viene acompañada por novedades, ya que el Ayuntamiento ha aprobado un nuevo contrato para la gestión del autobús urbano. Salamanca de Transportes, que lleva desde 1987, vuelve a ser la empresa que se encarga de un renovado servicio que contará con más líneas, frecuencias, paradas, vehículos…. El contrato es de 235 millones de euros y se inició el pasado 1 de junio.
La primera de la novedades que se ha puesto en marcha son las dos nuevas líneas del autobús urbano, la 14 y la 15, que permiten acercar hasta el Hospital y hasta el Campus Universitario Miguel de Unamuno a los vecinos de los barrios Pizarrales, Blanco, Capuchinos, Huerta Otea y El Zurguén, dando así respuesta a una reivindicación histórica.
La nueva línea 14 comunica los barrios de El Zurguén y Huerta Otea a través del Puente de Sánchez Fabrés, el Paseo de San Vicente, la Avenida de Filiberto Villalobos y la Avenida del Doctor Ramos del Manzano, con una frecuencia de 20 minutos.
La línea 15 une los barrios Capuchinos, Blanco y Pizarrales, cuyos vecinos, además del hospital y el campus universitario, quedarán comunicados con el centro de salud de Capuchinos. Esta nueva línea funciona con una frecuencia de 20 minutos y no afecta al recorrido de la línea 2, entre Pizarrales y Gran Vía, que se mantiene sin modificaciones.
En el primer mes de funcionamiento de estas dos nuevas líneas, han sido utilizadas por un total de 22.195 usuarios, según los datos del Ayuntamiento. En la 14, 13.325 viajeros; y en la 15, que no presta servicio los fines de semana, 8.870 usuarios.
Estas dos nuevas líneas se unen a las 13 que ya había y a las dos del servicio nocturno o búho (norte y sur). Por lo tanto las 15 líneas actuales son: la 1, Los Cipreses-Buenos Aires (por centro); la 2, Pizarrales-San Julián; la 3, Garrido-San José; la 4, Cementerio-Puente Ladrillo; la 5, Ciudad Jardín-Los Alcaldes; la 6, Garrido-San José (por Hospitales); la 7, Campus Unamuno-Prosperidad; la 8, Prosperidad-Chamberí; la 9, Capuchinos-Zurguén; la 10, Los Toreses-Vistahermosa; la 11, Los Cipreses-Buenos Aires (por hospitales); la 12, Barrio Blanco-Montalvo II; la 13, Huerta Otea-San José; la 14, Zurguén-Huerta Otea; y la 15 Capuchinos-Hospitales.
De esta manera, todos los barrios de Salamanca tienen ya una línea con conexión directa al nuevo Hospital y otras ocho líneas tienen parada en este centro.
Las más utilizadas son las líneas 3 y la 4, tanto en la actualidad como antes de la pandemia, aunque aún siguen sin recuperarse cifras. La línea 3 durante 2022 fue utilizada por 1.361.071 usuarios (1.758.331 en 2019) mientras que la 4 por 1.371.858 (1.837.566). Las que menos se utilizan son las nocturnas, con 27.249 y 30.729, respectivamente (más de 40.000 en ambas en 2019).
Otra de las novedades que ya se incorporaron este pasado junio fue una nueva parada para las líneas 1, 3, 4, 8 y 9 en la Gran Vía, a la altura de la intersección con la calle Marquesa de Almarza, en dirección hacia San Esteban.
Estas son las cifras de usuarios en el último mes y el aumento respecto al año anterior:
El resto de mejoras incluidas en el Plan Director del Autobús Urbano, el documento que regula las líneas, frecuencias y paradas en el nuevo contrato se van a ir implantando de forma progresiva durante los próximos meses. Un Plan que se ha redactado en diálogo con las asociaciones de vecinos y de acuerdo a las aportaciones de los integrantes del Grupo de Trabajo para la Reordenación del Transporte Público, que presentaron un total de 94 sugerencias, de las que se han incorporado, total o parcialmente, el 74 por ciento, según el Ayuntamiento.
En el resto de cambios que se van a ir implementando encontramos que la Línea 1 contará con un vehículo más y ampliará el recorrido con nuevas paradas en el centro de salud de Garrido Norte, la piscina de Garrido y la Biblioteca Torrente Ballester; la Línea 5 modificará el trayecto para acercar el bus al centro de salud de Tejares; la Línea 7 incorpora un autobús más para alargar el recorrido con nuevas paradas, sin afectar a los tiempos de espera y así recuperar también el servicio al Campus Unamuno; la Línea 8 también contará con un vehículo más, acercará a los vecinos de Vistahermosa a la Gran Vía y, junto con la línea 10, verán reducidos los tiempos de frecuencia que pasarán de 20 a 10 minutos de media. La Línea 11 también contará con un autobús más para reducir los tiempos de espera por debajo de los 15 minutos, mientras que la 12 modifica el trayecto para acercarse al centro de salud de Capuchinos, mejorar el acceso a las oficinas de San José y al polígono El Montalvo, además su frecuencia pasará de 45 a 20 minutos.
En la actualidad circulan 63 autobuses urbanos en días laborables y además hay otros 5 de reserva. Cerca del 70% de los vehículos están impulsados por gas, con lo cual la flota del autobús de Salamanca es una de las más ecológicas de España. Con el nuevo contrato habrá durante este mandato una incorporación de 25 autobuses eléctricos para sustituir 22 actualmente en circulación y otros 3 más para ampliar y reforzar tres líneas.
En la recuperación progresiva de usuarios, además de la normalización sanitaria, también han tenido que ver el descuento en las tarifas puesto en marcha por el Ministerio de transportes, Movilidad y Agenda Urbana, con una aportación del 30% por parte del Gobierno y un 20% por los ayuntamientos; todas la tarifas del bus urbano salmantino, excepto el billete ordinario, han contado (y cuentan de momento) con un descuento del 50%.
Una reducción que se une a la congelación de precios en el transporte urbano por parte del Ayuntamiento de Salamanca, que mantiene a la capital salmantina como una de las ciudades más baratas de España para viajar. Salamanca de Transportes tiene una amplia oferta de abonos: el bono bus ordinario y el especial, la tarjeta bus ciudad ordinaria y la joven. El billete ordinario cuesta en la actualidad 1,05 euros y no tiene descuento; con la tarjeta bono-bus ordinario cada viaje cuesta 0,59 euros, aunque en la actualidad con el descuento del Gobierno el precio es de 0,29. El bono-bus especial supone por cada viaje unitario 0,03 euros, con el descuento, 0,1 euros. Con la tarjeta bus-ciudad general, los precios base son 22,05 euros si es mensual, 65,50 euros trimestral, 130,00 semestral y 255,00 euros anual; con el descuento se han quedado en casi la mitad 11,2; 32,75; 65 y 127,5, respectivamente; mientras que para la tarjeta joven (menores de 30 años, empadronados en la ciudad de Salamanca o matriculados en la USAL o la UPSA) el precio de un mes son 14 euros, de tres meses, 41, de seis, 80 y anual, 155 euros; con los precios reducidos, el coste es la mitad.
Y ¿Cómo prefieren pagar los usuarios? El bono bus ordinario y el especial son los más utilizados por los salmantinos. El primero cerró 2022 con un total de 3.708.397 viajeros, lejos de los más de cinco millones registrados en 2019, mientras que el segundo, con 3.465.723, está más cerca de los 3,9 millones anteriores a la pandemia.
Con billete ordinario viajaron el año pasado más de 750.000 usuarios -fue superior al millón cuatro años antes-. También se mantienen por debajo de las cifras de 2019, el bus ciudad general y el joven (los que más se usan son los mensuales) con 807.382 y 798.651 usuarios, respectivamente, frente a 1,2 y 1,1 millones de antes de la pandemia.