Con el que llevaba varios meses de discreta relación.
Al margen de la boda de Tamara Falcó e Íñigo Onieva, este fin de semana nos ha dejado más noticias en el panorama social. Una de ellas, la ruptura de Belén Rodríguez con su novio, un maquinista de tren llamado Álvaro que le había devuelto la ilusión en el amor después de 20 años sin pareja, y con el que llevaba varios meses de discreta relación.
Ha sido la propia colaboradora de 'Fiesta' la que ha revelado el fin de su noviazgo después de que su compañero Aurelio Manzano le preguntase directamente por este tema. "Pues sí es verdad, hace dos semanas" ha anunciado visiblemente afectada y conteniendo las lágrimas a duras penas.
Sin entrar en detalles, Belén ha reconocido que, aunque "no me gusta mostrar mis debilidades en público ni dar pena, lo estoy pasando mal, aunque el sábado pasado estaba mucho peor que este". A pesar de que en estos meses no ha tenido problema en hablar de su felicidad al lado de Álvaro -con el que su noviazgo iba tan en serio que incluso vivían juntos en el piso que la tertuliana posee en el centro de la capital- en esta ocasión ha dado la callada por respuesta y no ha hablado de los motivos que les han llevado a emprender caminos diferentes cinco meses después de comenzar su historia de amor: "Es una persona anónima y no quiero hablar de él. Las historias son de dos y cuando no te entiendes con una persona es de dos. La decisión se toma entre los dos, uno siempre pone la última palabra", ha asegurado.
Un duro trance del que Belén no duda que se recuperará pronto, ya que como confiesa "si a mi algo se me da bien en la vida es reponerme y lo hago mejor que nada".