Yo no soy la persona para dar lecciones al feminismo. Es verdad que he escrito en revistas feministas, he estado en mesas redondas como único hombre y me han pedido conferencias sobre este tema, pero nunca me he definido como feminista. Seguramente porque sigo necesitando mejorar y me da pudor está autodefinición.
Pero ya he señalado en varios textos que este gobierno, el presidente, los ministros y ministras, especialmente las del ministerio de igualdad, están haciendo mucho daño al feminismo y la democracia.
Esté presidente se autodeclara feminista y nombra estas ministras que quieren ”salvarnos” y organizarnos hasta nuestra vida sexual y amorosa, han hecho leyes precipitadas, con grandes errores, arrogancia y obcecación.
Han manipulado por razones electorales, al feminismo, los transexuales y hasta los pobres, en un país en el que no deja de crecer la desigualdad.
Muy grave es lo que han hecho, bien por ignorancia, si son sinceros, bien por perversión del poder o bien por ambas razones.
También han hecho mucho daño al PSOE, que se ha degradado de forma increíble, aunque con su historia espero se recupere.
Varias instituciones están dañadas.
No sé cómo van a funcionar las nuevas alianzas, por otra parte inevitables. El PSOE sigue atado a partidos contrarios a España, y ya ha sido una catástrofe. Y el PP sigue entre la tentación conservadora y liberal y no sé cómo va a entenderse con VOX.
Los nuevos partidos lamentablemente no han mejorado el país, los nacionalistas y Marruecos siguen “en sus trece” y Vox, que ha sido el único en quedarse, tiene una radicalidad que puede resucitar a la extrema izquierda.
Había escrito todo esto y me encuentro con lo que solo es capaz de hacer un narcisista cuyo objetivo es mantenerse en el poder: el presidente, sin contar con el partido, ni sus ministros, decide adelantar las elecciones con el argumento de salvarnos de Vox. Es verdad que somos muchos los que vemos con preocupación a Vox, pero no es menos verdad que lo que ha hecho Sánchez, con sus socios, ha sido más grave y peligroso que Vox, porque no tiene ideología sino atracción ¿patológica? por el poder.
Espero que Europa, el nuevo ejército español europizado, los jueces, una iglesia distinta al 1936 y algunos políticos (Ganzález, Guerra, Nicolás Redondo, Page, Feijoo, Juanma Moreno, etc.) nos salven de esta locura sanchista, que es una especie de guerra civil sin armas. Son lo políticos los que practican el odio y nos quieren llevar a una confrontación irracional.
¿Caeremos los españoles en los problemas que nos crean los políticos?