Estos baños, perfectamente señalizados, facilitan la accesibilidad a los usuarios con estoma y están repartidos entre los diferentes edificios que conforman el CAUSA
Las cifras de personas a las que se les realiza una ostomía para resolver sus patologías intestinales o urológicas crecen cada año. Se estima que en España hay unas 100.000 personas ostomizadas; de ese total, más de 3.700 están en Castilla y León.
Existen diferentes tipos de ostomía, desde temporales a definitivas, si una vez eliminada la parte afectada de la vejiga o del intestino, no es posible la unión entre los tramos restantes. Por ello, este tipo de pacientes precisan de unas necesidades especiales para poder llevar a cabo una normalidad en su día a día; entre ellas, el tener que prever el vaciado de la bolsa de forma regular para evitar que se sature y tienen que hacerlo en aseos adecuados.
El Complejo Asistencial Universitario de Salamanca, siguiendo el compromiso de la Consejería de Sanidad de la Junta de Castilla y León (SACYL) para el bienestar de este tipo de pacientes, ya cuenta con cinco baños adaptados, con características especiales, para personas portadoras de estomas, repartidos por las diferentes infraestructuras con el objetivo de mejorar la accesibilidad a los mismos.
En el nuevo Hospital Universitario de Salamanca hay tres aseos de este tipo: uno de ellos en el acceso principal, en la planta Baja, en el Bloque E; el segundo, en la zona general de las Urgencias, en la planta Primera, en el Bloque F, y el último, en la planta de hospitalización quirúrgica, en la planta Sexta, en el Bloque D. Mientras que en la zona de consultas externas hay dos aseos adaptados más en el Edificio de Consultas 2, Virgen de la Vega: en la planta Baja, junto a la entrada, y en la planta Quinta, en la zona de consultas de Cirugía General, Cirugía Vascular y Cirugía Torácica. Están proyectados ya la adaptación de dos aseos para ostomizados más, que se ubicarán uno en el Hospital de Los Montalvos y el otro en el Hospital Virgen del Castañar, en Béjar, para mejorar así la cobertura de las necesidades de los pacientes en estos centros.
Los cuartos de baño adaptados a personas ostomizadas están compuestos por un WC suspendido a entre setenta y ochenta centímetros del suelo (para no tener que agacharse ni arrodillarse para vaciar la bolsa de ostomía), con cisterna empotrada en mueble de gran resistencia, de resina, carente de poros, anti bacterias y de fácil limpieza, con un pulsador para el grifo monomando con teleducha para enjuagar la bolsa y un espejo para poder ver el estoma, que está a la altura de la encimera, lugar donde colocar el recambio y los enseres para la higiene personal.