Ascensión Iglesias, presidenta de la Asociación de Mujeres Plaza Mayor, analiza cómo está la situación actual de las mujeres en la sociedad
La Asociación Mujeres Plaza Mayor lleva 37 años trabajando por los derechos de las mujeres y por la igualdad en Salamanca y provincia. Con el objetivo de conseguir la equidad, “trabajamos con las mujeres que nos piden ayudan, vengan con el problema que vengan”, explica su presidenta, Ascensión Iglesias.
¿Cómo es la situación de cara a este 8-M?
Las mujeres llegamos con mejoras conseguidas, pero en un momento de total confusión. Habíamos avanzado muchísimo en todos los aspectos, aunque todavía nos queda mucho por hacer, sobre todo por la cultura social que existe. Todavía hay personas que creen en establecer roles para unos y para otros, y aunque lógicamente desde el punto de vista jurídico hemos alcanzado la igualdad efectiva entre mujeres y hombres, a la igualdad real hemos llegado.
¿Por qué habla de confusión?
Quizá por diferentes leyes que han salido, por distintas voces que se escuchan en las que empezamos a oír de nuevo cosas del pasado que están intentando que retrocedamos. Pero no vamos a retroceder porque no lo vamos a permitir, aunque lo estén intentando.
¿En qué punto se encuentran ahora mismo los derechos de las mujeres?
Los derechos han sido establecidos y son inamovibles, son derechos que nadie puede tocar y ciertamente están ahí, existen y se han de cumplir. El derecho a la igualdad laboral, a la igualdad salarial, al empleo… todos los derechos que, en realidad, son derechos humanos. Lógicamente la sociedad está divida en dos sexos, hombres y mujeres, y también la sociedad había establecido diferentes roles, uno a nivel público y otro a nivel privado. En cuanto a la ley, en pleno siglo XXI y España que en muchas cosas ha sido pionera, eso no es posible. Además, existe esa conciencia que incluso tienen algunas mujeres, muy internalizada, eso es a lo que tenemos que aspirar, a que esto no sea así.
¿Cómo puede contribuir la sociedad a la concienciación?
Siempre hablamos de la sensibilización y la educación en igualdad. Nosotras participamos y realizamos talleres en algunos colegios e institutos tanto en Salamanca como en la provincia y el problema es que a veces nos encontramos es que luego estos niños y estas niñas llegan a casa y lo que le hemos explicado no se corresponden a lo que viven en el ámbito familiar. Por lo tanto, tenemos que lanzar voces en el que la igualdad tenemos que estar todos codo con codo y no a codazos.
¿Cómo ayudáis a las mujeres desde la asociación?
Estamos muy volcadas en ayudar a las mujeres víctimas de violencia de género y hacemos especial hincapié en aquellas que no están incorporadas al mercado laboral para que pasen a estarlo.
¿Cuál es el perfil de las mujeres que acuden a vosotras?
No hay perfil, vienen mujeres jóvenes, menos jóvenes, maduras y muy mayores. En el caso de los menores siempre tienen que venir acompañadas, hay algunas que vienen y nos preguntan, hacen consultas, pero suelen ser personas en torno a los 16, 17 o 18 años.
¿Cuáles son vuestras principales reivindicaciones?
La primera es terminar con la violencia de género, es algo espantoso que llevamos arrastrando y con lo que hay que terminar. Que las mujeres sepan qué es violencia de género, porque muchas de ellas no la asumen hasta que no tienen una violencia física y sin embargo vienen siendo víctimas de violencias económicas o psicológicas. Junto a esto, la incorporación al mundo laboral.
Un mensaje que lanza.
Mi mensaje esencial y fundamental a las mujeres es que crean en ellas, que sepan que tenemos los mismos derechos que los varones. Y un mensaje fundamental, que dejemos de lanzar mensajes que van en contra de la violencia de género y de la no igualdad que están haciendo mucho daño.