De momento hay un detenido, de nacionalidad portuguesa, y se ha desarticulado la banda especializada en esta trata de seres humanos
La Guardia Civil de Salamanca, en colaboración con la policía judiciaria de Portugal, ha llevado a cabo la denominada operación “Irala”, para liberar a nueve víctimas de explotación sexual y arrestar a un varón natural de Portugal. Además, se está investigando a varios miembros del grupo criminal que se encontraban fuera de España, como supuestos autores del delito de trata de seres humanos.
La forma de operar de este grupo consistía en captar mujeres en países sudamericanos, especialmente Paraguay, desde donde eran trasladadas a España con falsas promesas de trabajo. "Estas mujeres, vulnerables por su situación económica, no podían costearse el viaje a nuestro país por lo que el grupo criminal les facilitaba los billetes y los trámites necesarios para ello. Una vez en España eran informadas de la deuda contraída con la organización llegando a superar los 3.000 euros en concepto de gestiones para su traslado, retirándoles el pasaporte y creando una dependencia total con sus captores", explican los investigadores.
"Las víctimas, ante la deuda económica contraída, estaban en un régimen de vigilancia permanente, siendo incluso acompañadas por alguien de la organización cuando salían a adquirir alimentos u otros productos de necesidad", añaden fuentes de la Guardia Civil.
Durante la ejecución de las entradas y registros en un club de alterne y un domicilio ubicados en el término municipal de Fuentes de Oñoro (Salamanca) se localizó un club de alterne clandestino, en fase de construcción, ubicado en el sótano de la vivienda del detenido. Se había practicado un túnel de unos 60 metros para facilitar el acceso de los posibles clientes desde una parcela colindante a dicha vivienda, como medida de seguridad para dificultar la acción policial.