Según podemos leer en las escrituras, por las descripciones que nos dan de aquel día, no es posible que Cristo naciera el 25 de diciembre. La razón que se explica es que los judíos enviaban a sus ovejas a los desiertos cerca de la Pascua y estas volvían cuando llegaban las primeras lluvias, que comenzaban durante el otoño. Cuando Jesús nació, las ovejas pastaban al aire libre Y el cielo estaba estrellado, por lo que todavía no había llegado octubre, resulta difícil encajar al nacimiento de Jesús en el 25 de diciembre que posiblemente fue a finales de septiembre o principios de octubre.
Las Sagradas Escrituras que explican el nacimiento de Jesús, se encuentran en Lucas: "En la misma región había pastores que estaban en el campo, cuidando sus rebaños durante las vigilias de la noche" (Lucas 2:8).
¿Por qué asociamos el 25 de diciembre a la Navidad?
La explicación más consistente es que la Navidad estuvo relacionada con una serie de decisiones tomadas por los Papas en los siglos III y IV. Entre ellas, la más determinante, la moción del Papa Julio I en el año 350. Decretado 4 años después por el Papa Liberio.
El por qué de la elección de esta fecha se relaciona con la necesidad de la recientemente oficializada religión cristiana de imponerse sobre los tradicionales cultos paganos romanos. En diciembre se celebraba –en el Imperio Romano- el culto a Saturno, dios de la agricultura (principal sustento y actividad económica de estos pueblos). Las Saturnales se realizaban del 17 al 23 de diciembre, los días más cortos del año, y el 25 de diciembre se consideraba en nacimiento del nuevo sol.
La iglesia cristiana eligió el 25 de diciembre como día del nacimiento de Jesús como estrategia en su proceso de fusionar sus celebraciones con los ritos paganos de los diversos pueblos convertidos.
El ritual de la navidad fue evolucionando con los siglos, lo que festejamos hoy día es muy diferente de aquellas primeras navidades, y responde a costumbres del siglo XIX y a la influencia de la sociedad de consumo.
LA NAVIDAD Y SATURNO
El origen de la Navidad no es para nada cristiano. Es pagano. La primera vez que oímos hablar de las Navidades celebradas el 25 de diciembre (tal y como las conocemos hoy) surgen casi dos siglos después del nacimiento del niño Jesús,
Los romanos celebraban la Saturnalia que no era más que un festival que representaba el solsticio de invierno y honraban al dios Saturno. Durante esta fiesta, los romanos se alborotaban (bebían, comían y mantenían exceso carnal) por ello, los pocos cristianos que existían en aquella época, se oponían a estas celebraciones tan descontroladas. De esta manera se dice que la Navidad surgió para sustituir la celebración de Saturno, rey del Sol, que en inglés es “sun”, por lo que se tomó como el nacimiento del hijo de Dios Más tarde, cuando la religión cristiana se impuso en todo el Imperio Romano, Justiniano declaró la Navidad como fiestas cívicas, aunque poco duró esta compostura, en la Edad Media se convirtieron en días para beber y fornicar de la mañana a la noche.
De hecho, si conocemos las costumbres antiguas, resulta muy raro celebrar el nacimiento de alguien en los primeros siglos de Iglesia Cristiana, celebraba la muerte de las personas que eran importantes y no sus nacimientos.
La Saturnalia se celebraba cuando el sol estaba más bajo en el cielo y, los días se hacían más largos. Esto simbolizaba el crecimiento. Durante esta época se honraba a Saturno, dios del Sol y del fuego. Relacionado con la agricultura. El festival de invierno llamaba a este dios del Sol para que volviese y las cosechas siguiesen creciendo.
En el resto de las civilizaciones y culturas, también existía el dios del fuego y del sol. En Egipto lo llamaban Vulcano, los griegos Cronos, los babilonios Tamuz y Moloc o Baal para los druidas.
Saturno también era considerado un devorador de niños Se debe a que consideraban el fuego como algo divino que limpiaba los pecados y defectos que se transmitían de generación en generación, por lo que a los niños debían quemarlos para eliminar malas formaciones genéticas.
LOS REGALOS DE NAVIDAD
El origen de esta costumbre se remonta a los romanos, en Saturnalia, intercambiaban regalos unos con otros. Obviamente, durante estas fechas, no hacemos ofrendas a Dios, si no que nos las hacemos a nosotros mismos en forma de regalos, olvidando la figura de Cristo. De hecho, según indica la Biblia, el cumpleaños tampoco debería ser celebrado, porque estamos siendo, egoístas con Dios que hizo nacer al ser humano.
Cuando Jesús nació en Belén de Judea en días del rey Herodes, vinieron del oriente a Jerusalén unos magos, diciendo: ¿Dónde está el rey de los judíos, que ha nacido?… Y al entrar en la casa, vieron al niño con su madre María, y postrándose, lo adoraron; abriendo sus tesoros, le ofrecieron presentes: oro, incienso y mirra. (Mateo 2:1-11) Como indica la biblia, en el momento que los Reyes Magos le ofrecen obsequios al niño Jesús, es lo que en realidad debería ser la Navidad: unas fechas para hacer ofrendas a Cristo
Para nosotros ojalá no fuera tiempo de consumismo. Si no de encuentro interior, reflexion, amor y entrega... De todos modos, la verdadera historia del origen de la navidad no debe distanciarnos de nuestras creencias personales y familiares. Puesto que la esencia de estas fiestas trasciende lo histórico, y reside en lo espiritual.