Han pasado casi diez años desde que Fernando se acercó un día a nuestro local de la Calle Pérez Oliva, 15, en Salamanca, para presentarnos su nueva editorial, La Guarida, un proyecto al que quería y cuidaba como se quiere a un hijo que depende de ti para crecer. Con él descubrimos un artilugio para construir historias al que llamaba “El utopífono”, y también aprendimos a hacer “Subastas extraordinarias” con los niños que acudían a nuestros talleres. Después descubrimos “El secreto de Sofía” y lo compartimos con todos los que quieren descubrir, por ejemplo, cómo se abrazan unas gafas o dónde van los sombreros cuando se llenan de pensamientos.
Desde entonces no ha dejado de publicar auténticas maravillas que nos hacen leer, reír y cantar, como el singular “Esqueleto coqueto” o las divertidísimas “Gallinas Ponedoras”. Lo que publica es siempre inspiración para nuestro trabajo curioso y para nosotras es un orgullo haber crecido a su lado, en una ciudad como Salamanca en la que muchos proyectos que nacieron a la vez que los nuestros (nuestras amigas de “La Malhablada”, la mejor papelera del mundo en “Atentamente” …) ya no están, aunque tenían todo sentido en nuestro marco cultural actual.
Por eso cuando llego a nuestras manos su nueva colección “Leo, río y canto” especialmente dirigida a las primerísimas edades y centrada en la tradición oral pero con un toque curioso, ¡nos encantó! Os invitamos a que descubráis las nuevas versiones de las canciones populares “Cúcu”, “Aserrín” o “Que llueva” con la letra juguetona de David Hernández Sevillano; las preciosas ilustraciones de Ximena García; y con la voz de la maravillosa Chloe Bird, cantante extremeña a la que seguimos desde hace tiempo y que siempre nos emociona con lo que hace.
No podría tener un nombre más adecuado la colección. Leo porque alguien me acompaña con el cuento entre las manos. Río porque me emociono con lo que me cuentan; y canto porque disfruto de este momento on un libro entre mis manos ¡y así lo demuestro!