La doctora Hortensia García Briz, especialista en Ginecología y Obstetricia del Hospital de la Santísima Trinidad, recuerda que estas revisiones periódicas son necesarias, entre otras cosas, para facilitar la prevención y el diagnóstico precoz de distintas enfermedades
Desde la Fundación Hospital General de la Santísima Trinidad lanzan un mensaje claro: las revisiones ginecológicas son muy importantes para el cuidado de la salud de la mujer. Así, la doctora Hortensia García Briz, especialista en Ginecología y Obstetricia, señala que, aunque no existe una edad establecida para la primera visita al ginecólogo, el comienzo de la menstruación puede ser el momento adecuado, especialmente si se padecen trastornos menstruales: sangrado abundante, sangrado prolongado, dolor menstrual, etc. “En estas consultas solemos resolver todas las dudas que tienen nuestras pacientes, además de informarles sobre la importancia de seguir unos hábitos de vida saludable para la prevención de enfermedades y el cuidado de su salud. Sin embargo, es cierto que el porcentaje de adolescentes que acuden a la consulta de ginecología no es muy alto”, continúa.
Según explica la especialista, este porcentaje aumenta a partir de los 25 años, y es que a partir de esta edad es recomendable realizarse una revisión ginecológica periódicamente. Dicha frecuencia variará en función de cada mujer, de su edad y de los antecedentes médicos familiares o personales que tenga. “En cualquier caso, mi recomendación es que estos controles se realicen cada año, sobre todo, para facilitar el diagnóstico precoz de distintas enfermedades, como el cáncer de cérvix o el cáncer de mama (que tan alta incidencia tiene) y para valorar el estado de la salud sexual y reproductiva de la mujer”, destaca la Dra. García.
“Dado que en la actualidad la edad a la que se tiene el primer hijo se está retrasando, apunta la ginecóloga, los especialistas debemos advertir a la mujer de los problemas que pueden surgir si se retrasa demasiado, realizar las pruebas necesarias para evaluar su capacidad reproductiva e informarle de las opciones que existen para retrasar la maternidad de una forma más segura”.
“Del mismo modo, continúa, cuando una mujer desea quedarse embarazada es importante que acuda antes al ginecólogo para planificar el embarazo. Esta consulta preconcepcional nos ayuda a identificar el momento ideal, evaluando los riesgos y valorando el estado de salud de cada paciente, lo que nos permite adelantarnos y establecer, si fuera necesario, el tratamiento adecuado para prevenir complicaciones durante la gestación”.
Las revisiones ginecológicas con la llegada de la menopausia
La perimenopausia es el periodo de transición hacia la menopausia, condicionado por los desajustes hormonales. En esta fase, el ciclo menstrual empieza a ser más irregular hasta que desaparece por completo, comenzando la etapa de la menopausia. “Hay muchas mujeres que creen que a partir de este momento ya no es necesario acudir al ginecólogo, sin embargo, sigue siendo muy importante. Con la menopausia, aumenta el riesgo de padecer ciertas enfermedades, como la osteoporosis, la incontinencia urinaria, el cáncer de mama, el de ovario, etc., y estas revisiones nos pueden ayudar a detectarlas de forma precoz. Además, en esta nueva etapa, en la que se producen cambios significativos en la vida de la mujer, el acompañamiento y asesoramiento del ginecólogo también es fundamental, concluye la especialista.