La Ermita del Humilladero acogía la celebraciòn
Las calles de Peñaranda han recuperado este domingo una de sus celebraciones más tradicionales como es la dedicada a San Cristóbal, patrono de todos los conductores.
Tras dos años de silencio e inactividad debido a la llegada de la pandemia por el coronavirus, finalmente ha sido este domingo cuando la imagen ha vuelto a protagonizar un encuentro que ha contado con la participación de varias decenas de vecinos y en torno a un centenar de vehículos.
Unos actos que comenzaban a las 12:30 de la mañana con la celebración de una solemne eucaristía en la Ermita del Humilladero, tras la que comenzaba la breve procesión del santo, portado a hombros, por las inmediaciones del Templo, arropado por una destacada comitiva que contaba con una representación de la Corporación municipal con la alcaldesa Carmen Ávila a la cabeza.
Una vez concluida llegaba el momento más esperado, cuando el sacerdote, junto a la querida imagen, daba comienzo a la gran comitiva de vehículos, que fueron desfilando ante ellos para recibir la bendición y una estampa del patrono.