Se utiliza para muchos procedimientos médicos pero su déficit es "mucho mayor" que otros componentes de la sangre
El plasma es un componente de la sangre que se utiliza en intervenciones quirúrgicas, casos de grandes quemaduras, personas con inmunodeficiencias e incluso para elaborar terapias y medicamentos. Según Fernando Barbero, presidente de la Hermandad de Donantes de Sangre de Salamanca, “el plasma se usa muchísimo más” que otros componentes sanguíneos, sin embargo “siempre andamos con un déficit mucho mayor”. Por ello, animan a los ciudadanos salmantinos a hacerse donantes.
La donación de plasma se hace mediante un proceso llamado aféresis, gracias al cual una máquina saca la sangre pero se queda solo con un componente de la misma, en este caso el plasma. El resto, hematíes y plaquetas, vuelven al riego sanguíneo. Para llevarlo a cabo se puede solicitar cita en el hospital Virgen de la Vega. En una donación de sangre también se consigue plasma, pero en un porcentaje más pequeño.
Fernando señala que la gente es más reticente a donar plasma porque se invierte más tiempo en ello, un poco más de media hora frente a los diez minutos de la donación de sangre. Por otro lado, la recuperación es mucho más rápida tras este procedimiento: “en cuanto bebes agua prácticamente” y se puede realizar cada dos semanas, aproximadamente.