El miércoles pasado tenía lugar en la Filmoteca de Castilla y León el estreno de la película-reportaje “El arte de los pastores (Vidas, obras y creencias de los pastores de Salamanca”, del director de cine salmantino David Gómez Rollán, que estuvo presente en el acto y explicó el origen, la orientación y las dificultades para encontrar los objetos artísticos de los pastores de Salamanca y sus huellas sobre muros de piedra y sobre los objetos de su uso ordinario.
La película ha sido encargada y producida por el instituto de las identidades (IDES) de la Diputación de Salamanca. Por eso, participaban en la introducción inicial y en el coloquio posterior el concejal de cultura de la diputación D. David Mingo Pérez, el etnógrafo D. Carlos García Medina, la Directora de la Filmoteca de Castilla y León Dña. Maite Conesa Navarro y el propio director de la película David Gómez Rollán.
Destacaron los presentes la dificultad de encontrar los objetos artísticos propios de los pastores salmantinos, prácticamente extinguidos ya, y apenas fue posible hablar con uno de los pastores que han dedicado a la profesión toda su vida con gran ilusión, y que lamentan ahora la falta de continuadores en el cuidado de las ovejas.
La película entonces constituye un documento reflejo de la realidad de los pastores de Salamanca, en su mayoría ya desaparecidos, pero que, por lo mismo, merece la pena conservar en imágenes en la propia Filmoteca regional de Castilla y León, para constancia en el futuro.
Las pocas ovejas que quedan todavía son ya cuidadas con medios más modernos y no serán acompañadas por pastores que las guarden continuamente, con conocimiento individual y atención personalizada que, por otro lado, dejaban suficiente espacio libre para poder dedicarse a la realización artística de los diversos objetos personales.
Salamanca es quizá la provincia en que más objetos artísticos realizados por pastores se conservan, aunque la desaparición prácticamente total de los pastores tradicionales hacen más interesante la elaboración de un documento fílmico como éste.
La desaparición de los pastores, y casi también de las mismas ovejas, hace difícil el conocimiento, para las jóvenes generaciones, de la realidad de las ovejas y de todas las prácticas relacionadas con ellas.
Y, sin embargo, el tema de los pastores está muy presente en los escritos del pasado y en los propios evangelios y en otros libros de la Biblia, lo que exige contemplar la temática en las catequesis de formación cristiana de los más jóvenes, que oirán hablar de ovejas y pastores quedándose prácticamente a dos velas.
Es difícil hablar y entender que los cristianos seamos considerados como ovejas del rebaño de la Iglesia, que están confiadas a Jesucristo, el Buen Pastor, y se encuentran bajo los cuidados de los otros pastores: Papa, obispos, sacerdotes, maestros, catequistas, padres, etc.
En el rebaño que consideran los evangelios, y que traspasa las fronteras de la muerte, están presentes no sólo las ovejas situadas a la derecha del juez que juzgará el fin de la historia, sino que también hay cabritos que ocupan la izquierda del mismo juez.
Hoy los pastores siguen, a veces como malos pastores, guardando las ovejas y alimentándolas en valles floridos y frondosos, sirviéndoles el mejor y más codiciado alimento, el pan de la Palabra y la Eucaristía.
Y no se ven libres los pastores de dejarse contaminar de las oscuridades y de las manchas y heridas de los malos caminos. Pueden ser los problemas de la pederastia, de la ambición, del orgullo, del abuso de poder, etc. Pero el gran Pastor ayudará a superar las malas orientaciones y a acertar a conducir a las ovejas hacia las fuentes tranquilas y la comida que nutre el corazón y ayuda a recorrer con acierto los caminos que conducen al redil final.
Enhorabuena a los creadores y productores del corto salmantino “El arte de los pastores”.