El autor tenía un juego de llaves con mando a distancia que abría la puerta automática que daba acceso al garaje
Los hechos ocurrieron en la calle Poeta Jesús Rasueros, en la noche del lunes 23 de mayo, cuando un vecino alertó a la Policía Nacional porque se oían ruidos que provenían de los trasteros.
Los agentes vieron como la cerradura de uno de ellos estaba fracturada y una caja de cartón contenía varias botellas de aceite, una caja grande de cola-cao, una bolsa de plástico con varios envases de embutido, dos botes de suavizante para la ropa, un bote de champú y un bote de limpiador multiusos.
En otro de los pasillos había una maleta negra junto a un paquete de rollos de papel higiénico y en el interior de la misma había dos botes de 5 litros con producto para fregar, tres botes de detergente líquido para lavadora, y un paquete con seis cajas de tomate frito.
Después, en el interior de uno de los trasteros localizaban a un varón que al ver a los agentes, deposita en el suelo dos destornilladores, una llave inglesa y un par de guantes. Además, tenía dos juegos de llaves con mando a distancia, uno de los cuales abría la puerta automática que daba acceso al garaje.
Por todo ello, el sujeto fue detenido.