La Asociación Teatral LaTEAdeTRO cerró el pasado domingo en Certamen Nacional de Teatro de Vitigudino. Diez actores y actrices en bucle constante construyen una perfomance muy equilibrada en su coreografía, de postal en ocasiones, explicando la oscura y humillante experiencia que puede llegar a ser la emigración forzosa y desesperada de personas normales que viven de forma rutinaria con su trabajo, hijos y vida con las precariedades y equilibrios propios de una sociedad actual. Cuando esa vida se desmorona a causa de la guerra o elementos de grandes desastres naturales o pandémicos, cuando se huye a la desesperada de la cuna, del hogar, de la cotidianidad establecida, sólo con lo puesto, con una maleta o mochila, donde va lo material, y con la mente destrozada por el miedo y la angustia donde se esconde lo emocional….
De eso trata Travesías, de desesperación, de ultraje, de mentiras piadosas, de verse de golpe sin casa, sin pareja, sin hijos, sin nada, sólo una maleta y la vista a un abismo incierto, desconocido, con una línea de esperanza al fondo, muy al fondo.
El argumento no puede más actual y oportuno. Sólo faltó en algún monólogo la palabra Ucrania. La historia parecía nacida y escrita allí mismo.
Nos encontramos ante un teatro testimonial, de puro mensaje emocional, contado a través de sucesivos monólogos cuyos personajes representan arquetipos sociales muy reconocidos, la madre gallega desesperada por vislumbrar un futuro mejor, el homosexual contra la intransigencia social, la mujer maltratada, humillada y violada etc…Todos ellos persiguen un objetivo: subir a un barco (sueño de un futuro mejor) que les aleje de la miseria y haga posible un destino más vivible.
La puesta en escena es brillante, sorprendente a veces en los recursos escénicos, como la simulación del barco y las olas del mar. Hay un elemento coreográfico grupal muy llamativo que, indudablemente, ayuda al espectador a saborear el argumento.
Destacado para mi esencial, la orquestación general de la obra trazada por los elementos de luz y sonido, Miguel de las Heras como diseñador de la iluminación y Jesús Soria como técnico de sonido, consiguen armonizar perfectamente el drama y la desesperación que destila el texto manejando con habilidad los recovecos y remansos de luz y sonido. Impacta los sentidos y reafirma la tensión.
Aunque me sobra alguna escena final de postureo colectivo innecesaria, el trabajo de todo el elenco es admirable. El mensaje es contundente y ellos, Maribel Santamaría, Mariloli Romero, Cristina Santamaria (Directora), José A. Ronaldo, Gema S. Román, Victoria Alonso, Pedro Navarro, Eusebio Mateo y Pedro Navarro, hacen posible que el personal se conmueva.
Interesante obra, Travesías, que mereció mayor asistencia de público.
La larga ovación final a todo el elenco, justa y cabal.