El periodista Noel Campo da su opinión sobre el Salamanca UDS en la sección de este medio con colaboradores
Eppur si muove o ("Y, sin embargo, se mueve" en castellano), es la hipotética frase italiana que habría pronunciado Galileo Galilei como un susurro casi inaudible al terminar la lectura de la abjuración a que fue obligado por su teoría heliocéntrica. En la actualidad, esta frase se usa para expresar que, aunque se niegue la veracidad de un hecho, este es cierto.
Varios siglos después, esta situación tiene mucha similitud con la realidad del Salamanca UDS. Para una parte importante de la afición, el equipo llevaba descendido varias jornadas e incluso meses. Por fortuna, la llegada de María ha cambiado -al menos de forma temporal- un final dramático. La victoria frente al Ceares del domingo y los resultados en otros campos han permitido demostrar que el equipo sigue vivo y moviéndose por salvarse, aunque muchos lo nieguen.
La salvación está a 2 puntos a falta de tres partidos para el final de liga. El objetivo no es fácil, pero si al alcance de la mano. Quedan 3 rivales de peso como son Cristo Atlético, Pontevedra y Compostela que se juegan ascender de manera directa o meterse en el playoff de ascenso. Casi nada. Evitar el descenso significa que se debe sumar al menos 6 puntos para salvar la categoría de manera directa. Muy difícil, pero no imposible. Si el equipo ha sido capaz de ganar al Navalcarnero y de puntuar poniendo en serios apuros al Adarve en su casa, la gesta, se puede conseguir. Incluso la posición de playout podría dar la salvación directa al ser el grupo con más puntos en ese puesto, lo que eximiría de un posible duelo a muerte en campo neutral.
La propia afición del Salamanca, a veces, puede ser peor que la Santa Inquisición con Galileo. Hubo algunos lances del partido que no gustaron. Incluso, pese a la goleada del pasado domingo, muchos aficionados salieron del Helmántico poco contentos con el juego que se desplegó. En parte, tienen razón. El conjunto asturiano no debería haber tenido ninguna ocasión y mucho menos, ser capaz de perforar la portería de Salcedo. No se puede empezar ganando y echarse atrás ante un equipo muy inferior. Ni tampoco permitir que un rival tan pobre te genere tantas ocasiones de peligro. Cuestiones una semana más a trabajar y mejorar.
Es el momento de acelerar la contratación del nuevo responsable de la parcela deportiva y que pueda ver, valorar y tomar decisiones antes del final de temporada. Como ejemplo, el Alcorcón; descendido ya de segunda división, ha presentado esta semana a su nuevo responsable deportivo. Eso es lo normal en el planeta futbol. En las oficinas de la entidad blanquinegra se empiezan a escuchar nombres y ofrecimientos de antiguos jugadores de la UDS para dirigir la parcela deportiva. Espero que se acierte y no pongamos al primer iluminado, vende humos sin experiencia que deje su curriculum por el mero hecho de haber vestido los colores blanquinegros.
El club debe buscar algún aliciente más para que el partido frente al Cristo Atlético sea un búnker lleno de aficionados salmantinos. La salvación pasa por el Helmántico. Hay que motivar a que el público venga al estadio. El horario y el día no es el mejor, ya que se celebra el día de la madre y muchas familias, lo festejaran comiendo fuera de casa. El club debería haber retrasado al menos una hora el comienzo del partido para dar tiempo a la sobremesa y así enganchar a todas esas familias. Además, se juega en medio de un atractivo y masivo puente festivo. No es cuestión de abrir las puertas de acceso de par en par, porque con eso solo no vas a conseguir más afluencia. El Salamanca debe buscar de forma urgente algún reclamo -más allá de lo deportivo- que permita enganchar a antiguos seguidores y captar nuevos fieles para la causa. La afición tiene que empujar. Una semana más, el Salamanca, pese a que muchos le den por desahuciado, debe moverse más que nunca en todos los aspectos.