A pesar del mal tiempo fue numeroso público el que asistió a las primeras fiestas de los pueblos de comarca
Como agua de mayo los habitantes de Gallegos de Argañán esperaban sus fiestas patronales en honor al Cristo de la Exaltacion. Agua fue la que cayó durante la mañana del viernes que hacía temer por la celebración del toro del cajón que se celebra este año por primera vez.
EL cielo de la tarde, aunque con amenaza de lluvia débil, dio tregua para que los galleguinos y buena parte de sus vecinos de los pueblos de alrededor pudieran disfrutar de este primer evento taurino, prolegómeno de estas fiestas y de las que vendrán de ahora en adelante hasta el mes de octubre que terminarán con las de Alba de Yeltes.
A las siete y media de la tarde se dio suelta un novillo berrendo aparejado, de la ganadería salmantina de Eduardo Martín Cilleros en la Plaza de la calle Extramuros.
Rápidamente el animal se adentró en la calle de José Antonio, que lo llevó a la Plaza Mayor convertida en coso taurino para estos días para quedarse prácticamente en el albero todo el tiempo reglamentario.
Los mozos lograron sacarle de la Plaza tan solo unos metros abajo de la calle José Antonio, donde el novillo embestía contra las talanqueras, cebándose con un contenedor de basura que no tendría que haber estado en ese lugar.
Tras un tiempo en la calle, el astado se volvió en busca del albero donde ya los mozos desistieron de llamarlo para que corriera por las calles. EL público aficionado tuvo que concentrase en la Plaza para poder ver al novillo, pues muchos de ellos por llegar un poco más tarde de la suelta no lo habían visto aún.
La verdad que, con la tarde fría amenazante de agua y el novillo bastante parado tras las primeras carreras, empezó a hacerse un poco pesado y aburrido a pesar de la demostración de valentía de algunos mozos.
Una vez terminado el tiempo reglamentario se procedió a guardar al cornúpeta, ocasión que el público aprovechó para tomar algún refrigerio y pasar un rato juntos tras dos años sin poder celebrar las fiestas con cierta normalidad.
Ya por la noche la orquesta Marsella amenizó con una verbena la velada en la Panera, muy útil para acoger este evento con la climatología actual.
Para la jornada sabatina día 23 de abril el que no quiera ir Villalar puede optar por el encierro mixto a caballo a las 12:30 de la mañana con novillos de la ganadería El Collado de Yeltes, sin duda es el atractivo que más visitantes reúne de toda la comarca y buena parte de los vecinos portugueses.
A las 18:00h. una capea al estilo tradicional con los novillos y vaquillas del encierro mañanero darán opción a los mozos y mozas demostrar la valentía ante el ganado bravo en la Plaza Mayor convertida en coso taurino para estos días.
Al terminar sobre las 20 horas un desencierro de las reses capeadas por las calles del pueblo dará paso ya por la noche tras unas horas de descanso o júbilo a las 12 de la noche a otra verbena amenizada por el grupo Malibú Show.
Las previsiones del tiempo no es que sean muy esperanzadoras para este segundo día de fiestas, pero las ganas de eventos taurinos van a poder con la lluvia tan necesitada para el campo y tan engorrosa para este tipo de eventos
El domingo 24 de abril comenzará al igual que el día anterior con un nuevo encierro mixto a caballo de la misma ganadería que el día anterior.
Por la tarde, a las 17:30h. tres alumnos de la escuela taurina de Salamanca lidiarán tres novillos, dando paso al terminar sus faenas sobre las 18:30h a una capea al estilo tradicional con su tradicional desencierro al terminar la capea.
Ya el lunes día 25 de abril pasado el fin de semana, los lugareños tienden a una programación más familiar y para los suyos, empezando el día pensando en los más pequeños con un encierro infantil a partir de las 11 de la mañana con hinchables, globoflexia y clase de zumba para niños y niñas.
Para las 14h. se hará una comida popular de confraternidad en la Panera que tras terminar esta, todos los asistentes harán un recorrido por las peñas acompañados por una charanga.
A las 23h. los aficionados al baile podrán disfrutar de la última verbena a cargo de la orquesta Musical Resaka.
La jornada del martes día 26 de abril se llevará a cabo el acto solemne de las fiestas con el panegírico y procesión del Cristo de la Exaltación a las 12 de la mañana que dará paso a un aperitivo para todos los vecinos en el local de las piscinas municipales.
Por la tarde y para terminar las jornadas festivas del año 22 a las 18:30h tendrá lugar una capea al estilo tradicional y el desencierro de las reses capeadas en la plaza.
Durante todos los días festivos las charangas mirobrigenses ‘Al Rojo’ y ‘Manliao’ animarán con su música a los participantes en las diferentes actividades.