Además de reducir la siniestralidad vial y reforzar la seguridad al conducir, hace hincapié en evitar las distracciones al volante por utilizar dispositivos de telefonía móvil
Desde este lunes, día 21 de marzo, saltarse las normas de circulación puede salir más caro e implicar la pérdida de más puntos. Entra en vigor la nueva Ley de Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial, y lo hace con el endurecimiento de algunas sanciones. Una ley que, como señalan desde la DGT (Dirección General de Tráfico), se adapta a los tiempos. “Las nuevas formas de movernos, conectarnos y comunicarnos nos exigen evolucionar”, asegura.
La nueva Ley de Tráfico busca reforzar la seguridad de los conductores y seguir reduciendo las cifras de siniestralidad vial. En 2021 se registraron un 9% menos de fallecidos en accidentes de tráfico que en el año 2019, siendo el segundo mejor año de la serie histórica (por detrás de 2020, año marcado por la pandemia y las restricciones a la movilidad). En Salamanca, durante el pasado 2021, se registraron 5 víctimas mortales en las carreteras, frente a las 18 del año anterior. Según datos de la DGT, se registraron 206 accidentes con víctimas en las carreteras salmantinas, con 26 heridos hospitalizados, 271 heridos no hospitalizados y 5 fallecidos.
Aunque los conductores conocen las normas, no todos las cumplen, y la prueba es el elevado número de multas que ha puesto Tráfico en el último año en Castilla y León, y también en Salamanca. En la provincia salmantina se superan las 62.000 multas de Tráfico durante 2021 (62.828), cifra que alcanza las 596.917 multas en Castilla y León. El exceso de velocidad es el principal motivo de sanción, el 73% del total.
Esta nueva Ley de Tráfico también hace hincapié en evitar las distracciones al volante por utilizar dispositivos de telefonía móvil. Desde este 21 de marzo sujetar el móvil con la mano -independientemente de si se está hablando- mientras se conduce puede suponer una pérdida de 6 puntos (frente a los 3 de antes) y una multa de 200 euros. La media en Salamanca son un millar de multas al año a conductores ‘cazados’ hablando por el móvil al volante.
Se puede utilizar dispositivos de telefonía móvil y cualquier otro medio o sistema de comunicación, siempre y cuando la comunicación tenga lugar “sin emplear las manos ni usar cascos, auriculares o instrumentos similares". Tampoco esté prohibido el uso de navegadores siempre y cuando no supongan una distracción al volante. Para ello, la solución es utilizar dispositivos que se controlen mediante el habla.
Además, a partir de ahora, llevar inhibidores de radares o cinemómetros en los vehículos está prohibido, estén conectados o no. Son sistemas que interfieren en el correcto funcionamiento de los sistemas de vigilancia de tráfico por lo que no se permite llevarlos. Hacerlo supone la pérdida de 3 puntos y una multa de 500 euros.