Joaquín Pellicer denuncia que se han limpiado terrenos privados en torno a la potabilizadora con recursos públicos
El Ayuntamiento de Ciudad Rodrigo celebró durante la tarde del jueves una sesión Ordinaria de Pleno que apenas alcanzó la media hora de duración, no dejando ningún titular de excesiva relevancia, algo que ya se preveía teniendo en cuenta que el Orden del Día sólo incluía dos puntos especificados, que fueron aprobados por asentimiento de todos los presentes (estuvo ausente el concejal de IU, Alfredo de Miguel, siendo la novedad el regreso físico al salón de plenos de Juan Tomás Muñoz y Davinia Montero).
En lo que respecta a esos puntos especificados, por un lado se aprobó el nuevo texto del convenio y de los estatutos para la constitución de la Eurociudad Puerta de Europa, después de que la Secretaría de Estado de Política Territorial y Función Pública haya propuesto un par de modificaciones al texto original: eliminar a la Junta de Freguesía de Vilar Formoso como entidad fundadora, ya que forma parte de la Câmara Municipal de Almeida; y la supresión de la figura de los miembros honorarios, según explicó Beatriz Jorge Carpio. Por otro lado, se aprobó el Plan de Medidas Antifraude del Ayuntamiento de Ciudad Rodrigo, que se ha impuesto como obligatorio desde el Gobierno al hilo de los fondos europeos, según indicó Laura Vicente.
La parte principal del Pleno fueron los ruegos y preguntas de la oposición, versando cuatro de ellas sobre aspectos del Carnaval. Por ejemplo, Begoña Moro preguntó qué había ocurrido con los toros de la capea nocturna del Viernes, ya que finalmente salieron otros a los anunciados, sin que lo supieran siquiera los miembros de la Comisión. Ramón Sastre explicó que esa misma tarde, a la hora de cargar los toros, el veedor descubrió que a uno le faltaba un ojo y el otro tenía una pata colgando. A partir de ese momento, hubo una larga ‘negociación’ con el ganadero, hasta que se acabó acordando traer dos astados de la misma ganadería aunque de otro hierro.
Begoña Moro preguntó asimismo si habían llegado animales muertos al matadero, explicando Ramón Sastre que eso ocurrió con 2 toros (pasan a considerarse ‘decomisados’), mientras que en 2020 hubo 3. Además, un toro que se tuvo que sacrificar en el Ayuntamiento se pasó directamente al camión que acude a recoger a los animales de muerte de los festivales de la tarde, para así no perder esa canal.
Por otro lado, a preguntas de Juan Tomás Muñoz, Ramón Sastre explicó que un banco de la parte sur de la Plaza Mayor se había quitado para permitir el montaje de una de las barras callejeras de bar, estando previsto su regreso para los próximos días, durante los cuales una cuadrilla recorrerá los rincones que sean necesarios para arreglar los desperfectos que ha dejado el Carnaval (por ejemplo hay que colocar una piedra en la zona de las Puertas de Amayuelas).
Fuera del Carnaval, Carlos Fernández Chanca planteó que quizás se debería entrar en contacto con los ucranianos de Salamanca para intentar organizar la donación por parte de mirobrigenses de objetos materiales, apuntando Davinia Montero que el Consistorio se ha reunido con entidades locales del Tercer Sector y se ha determinado que lo mejor es recaudar dinero para que lo empleen en aquello que más se necesite, pero sin cerrar otras puertas.
Como último asunto del Pleno, el portavoz de Ciudadanos Joaquín Pellicer denunció que se habían usado recursos públicos, en concreto trabajadores municipales del servicio de Jardinería, para limpiar terrenos privados en la zona de la potabilizadora municipal (en la Peña del Sastre). José Manuel Jerez explicó que había mandado desbrozar y que “me he enterado hace unos días” que un terreno limpiado era de un particular (añadió que tampoco se sabría muy bien hasta dónde llega exactamente la parte municipal). Este extremo fue negado por Joaquín Pellicer: “todo lo que se han limpiado son solares privados; el único público es donde se ha puesto la dotación infantil”, definiendo como “lamentable” que “no se sepa dónde se está limpiando”.