LA VERDAD
Decía el ciego al muchacho: quiero que tus palabras no me hagan pensar demasiado, porque la verdad es concisa; clara como el agua que resbala por la falda de la montaña, no admite doblez. Sabré que te apartas de ella, si no soy capaz de comprenderte.
LOS PLACERES DE LA VIDA
Una buena comida, un vino generoso, incluso el placer del amor, no gerean confianza ni estabilidad. Son tan breves sus efectos que no merecen el precio que pagamos por ellos.
CONFORT
Cuando vivimos bien, el confort nos induce a pensar que todos viven bajo su tutela. De vez en cuando, tendríamos que prescindir de esos beneficios para apreciar su verdadero valor.
BELLEZA
Si una persona hermosa se cruza en tu camino no mires hacia otro lado. El fin de la belleza es su contemplación. Pero has de controlar tu imaginación para que esa belleza conserve toda su integridad.