Su nombre está siempre ligado a la entrega por disfrutar intensamente de la vida, pero desde la continua disposición a enseñar al mundo todo lo que ocurre a su alrededor. Es la crónica de un enamorado de su Macotera, Villa de la que hace gala siempre que la actividad se pone en marcha en sus calles, plazas o lugares culturales, algo que siempre retrata y que le ha hecho más querido que reconocido por multitud de macoteranos y vecinos de la comarca.
José Guerras es comerciante de profesión, pero vecino, amigo y mil facetas más en su vida personal, esa que cuenta desde hace muy poco tiempo con un capitulo subrayado, cuando los sanitarios del Centro de Salud de Peñaranda le anunciaban su positivo por coronavirus y el inmediato ingreso hospitalario.
Una pesadilla que arrancaba semanas atrás cuando, tal y como relata José, "me enteré que era positivo porque fui a urgencias a Peñaranda ya que había estado unos días con fiebre. Me hicieron la prueba de antígenos y di positivo, aunque no tenía síntoma alguno".
Una complicada realidad, que también afectaba a su entorno más cercano, ya que como recuerda, "hemos estado controlados por los rastreadores mi mujer y mis dos cuñados que dieron positivos, menos el pequeño".
La situación, que se presentaba como un principio de neumonía, llevaba a José Guerras a su internamiento en el comp
lejo hospitalario de Salamanca, días que fueron tan emotivos como inciertos. "Estuve ingresado 8 días, algo que decidieron tras ver una posible neumonía y no quisieron mandarme para casa por prevenir. Tengo que dar las gracias a todo el equipo médico del Hospital Universitario, tanto a facultativos, como a celadores y enfermeros. Todos ellos han tenido un trato verdaderamente delicado y profesional".
Desde ese momento su vida parecía detenerse, algo que literalmente se producía en su pequeño negocio macoterano, ya que su esposa también resultaba positiva por Covid en el rastreo, lo que imposibilitaba abrir las puertas de la tienda, con el perjuicio económico y social que supuso. Pero fueron unos días y finalmente, tras más de una semana de ingreso, José volvía a su casa, junto a su mujer, su hija y sus nietos, recuperando una normalidad que el virus, del que tanto ayudo durante los peores tiempos de la pandemia, le había arrebatado.
Hoy ya en casa, a las puertas de la Navidad, y con una más que complicada situación sanitaria ante el aumento de positivos Covid en Macotera y la comarca de Peñaranda, lanza un mensaje de alerta para vecinos y visitantes. "Yo lo he vivido en mis carnes, se lo que es? por eso para estas navidades pido a la gente muchísima precaución, el bicho sigue aquí, usar las mascarillas y las reuniones que no sean muy numerosas?y ante todo feliz Navidad para todos".