La jornada tenía como ponentes al director general de Política Agraria Comunitaria, Pedro Medina, y a Nuria Ruiz Corral y José Antonio Turrado, gerente y secretario general de ASAJA de Castilla y León, respectivamente
Responsables del equipo técnico de ASAJA en las nueve provincias de Castilla y León se han reunido este miércoles en Valladolid para conocer de primera mano todos los cambios que supondrá para los agricultores y ganaderos la nueva PAC 2023-2027, cuyo Plan Estratégico nacional fue dado a conocer ayer por el Ministerio de Agricultura, una PAC que el presidente de la OPA, Donaciano Dujo, ha descrito como "la peor PAC que hemos conocido, puesto que contará con menos presupuesto y más limitaciones y obligaciones, especialmente para el profesional, al que se penaliza directamente".
La jornada se ha celebrado en la sede del Consejo Económico y Social de Castilla y León, y su presidente, Enrique Cabero, ha acompañado a los asistentes en la inauguración. Las ponencias corren a cargo del director general de Política Agraria Comunitaria, Pedro Medina, y de Nuria Ruiz Corral y José Antonio Turrado, gerente y secretario general de ASAJA de Castilla y León, respectivamente.
En la presentación del acto, Donaciano Dujo ASAJA ha recordado las "decenas de reuniones y muchas, muchas horas, dedicadas por ASAJA a revindicar cambios y mejoras sobre los primeros documentos que llegaban de Bruselas, con propuestas aún más estrambóticas que las actuales, y que en parte hemos logrado limar en las negociaciones. Pero hay un tema esencial y político, que es quién cobra la PAC, en el que el ministro no solo no nos ha escuchado, sino que ha empeorado lo que había, porque ha preferido atender al granero de votos mayor, que es el de la agricultura a tiempo parcial y de otros muchos que cobran PAC sin estar realmente en el sector". Este criterio del ministerio, "ideológico, pero no agrario, supone que en la práctica casi cualquiera puede acceder a las ayudas, y encima se verán beneficiados por un pago redistributivo que resta fondos a las explotaciones de los profesionales".
La percepción de las ayudas estará supeditada a múltiples y a veces contradictorios requisitos, que condicionarán tanto el pago base (con una condicionalidad reforzada), como el cumplimiento de los "ecoesquemas", que incrementarán las tareas burocráticas de cada explotación. "El agricultor y el ganadero podemos hacer todo perfectamente y aun así cualquier fallo en el registro de nuestras actividades puede suponer problemas, por lo que más que nunca vamos a necesitar el asesoramiento de nuestro equipo técnico, que no falla porque está especializado en lo nuestro", señaló Donaciano Dujo.
Tras la presentación ayer del Plan Estratégico nacional, en el primer semestre se gestará el documento que definitivamente eleve España para ser supervisado y aprobado en Bruselas, normativa que, una vez desarrollada, entrará en vigor en enero de 2023. En cada paso, "ASAJA seguirá vigilante, proponiendo y reivindicando mejoras para los agricultores y ganaderos, y a la vez nuestro equipo técnico estará asesorando a cada socio para pueda adaptar su explotación de la forma menos gravosa posible", ha apuntado Donaciano Dujo.