El Impuesto sobre las Transmisiones Patrimoniales (ITP), el tributo más relevante para las viviendas usadas, cuyo porcentaje varía en función de la CCAA
A la hora de comprar una vivienda de segunda mano no solo hay que tener en cuenta el precio de venta, sino otros gastos adicionales. Es el caso, por ejemplo, del Impuesto sobre las Transmisiones Patrimoniales (ITP), el tributo más relevante para las viviendas usadas, cuyo porcentaje varía en función de la comunidad autónoma en la que se encuentre la vivienda. Este tributo suele oscilar entre el 4% y el 10%.
El portal inmobiliario Fotocasa ha calculado lo que tendríamos que pagar en gastos en cada comunidad autónoma por una vivienda de 200.000 euros de segunda mano. Si la vivienda se encuentra en Castilla y León, el comprador tendrá que pagar por el ITP en torno a 16.000 euros, un importe que, según los cálculos de Fotocasa, son superiores a los que habría que pagar por este impuesto en otras comunidades como Madrid (12.000 euros) o Andalucía (14.000 euros), pero inferiores a los que se pagaría en Castilla-La Mancha (18.000 euros) o Cataluña (20.000 euros).
Otros gastos que hay que tener en cuenta a la hora de adquirir la vivienda son los honorarios de la gestoría, la inscripción en el Registro de la Propiedad y la escritura pública en la notaría.