Los socialistas demandan "medidas más eficaces" para controlar la población de estas aves y el PP responde que desde la primavera se han reforzado las labores con más medios técnicos y más personal
Nueve cruce de declaraciones entre los grupos municipales del PSOE y PP del Ayuntamiento de Salamanca, en esta ocasión por los estorninos y palomas en las calles. Así, el PSOE ha pedido "medidas eficaces que permitan controlar la gran población de estorninos y palomas debido a las molestias más allá de lo razonable que provocan a vecinos de diferentes barrios y zonas de la ciudad, sumado a la imagen de dejadez resultante de la falta de limpieza".
Los socialistas añaden que "la suciedad generada por la acumulación de excrementos de este tipo de aves afecta cada día a toda clase de mobiliario urbano, aceras, avenidas, pasos de peatones y vehículos privados estacionados en determinadas calles y plazas, con el consiguiente perjuicio para la ciudadanía". Además, "supone un riesgo para la salud pública", especialmente en puntos con más arbolado como parques y jardines. A su juicio, "es evidente que las medidas aplicadas en la actualidad han dejado de ser eficaces".
En respuesta a estas criticas, el PP ha señalado, en una nota remitida a los medios, que el control de la plaga de estorninos y la limpieza de sus excrementos "se ha reforzado en toda la ciudad desde el pasado mes de abril y las nuevas medidas puestas en marcha avanzan en su eficacia, por lo que los socialistas vuelven a llegar tarde y mal a la mejora de los servicios públicos, siempre por detrás del trabajo del Gobierno Municipal y pecando de oportunistas para intentar anotarse tantos que no les corresponden".
En los últimos años, añaden, ha cambiado el comportamiento y la densidad de población de estorninos, que ya no solo forman dormideros invernales, sino que se agrupan en grandes bandos durante todas las variaciones estacionales. Por este motivo, el Ayuntamiento de Salamanca "adjudicó un nuevo contrato para el control de esta especie y de otras poblaciones de aves en la ciudad con la finalidad de establecer un plan integral y de vigilancia durante todo el año".
"Desde la primavera se han reforzado con más medios técnicos y más personal las labores que se llevan a cabo para el desplazamiento y la expulsión de estorninos, palomas torcaces, grajillas y urracas, que habitualmente ocasionan daños y molestias a las personas o problemas de salubridad en la vía pública y el sobre el mobiliario urbano debido a los excrementos que generan. Así, entre abril y agosto se llevaron a cabo 882 actuaciones en 67 ubicaciones diferentes de la ciudad".