El portero titular mirobrigense Pepo sufrió durante la semana la rotura del tabique nasal y deberá pasar por el quirófano
El Ciudad Rodrigo CF no pudo pasar en la sobremesa del sábado del empate a 0 en su visita al UCAV Diocesanos de Ávila, uno de los dos equipos que empezaba la jornada con 0 puntos en su casillero (el otro que estaba en esa situación, el Atlético Astorga, también ha dicho adiós este fin de semana al '0' con un triunfo). Este empate sin goles de los mirobrigenses duele más porque tuvieron en su mano el haberlo roto, especialmente desde el punto de penalty, pero marraron dos lanzamientos.
El primero de ellos, lanzado por Alberto García nada más comenzar el segundo tiempo, lo detuvo el portero del Diocesanos (que también solventó el rechace posterior); mientras que el segundo, justo cuando el partido entraba en el tiempo de descuento, lo mandó Maza por encima del larguero. Ese tiempo de descuento lo jugó el Ciudad Rodrigo en superioridad numérica, ya que un jugador del Diocesanos ?que apenas llevaba 10 minutos sobre el campo- vio la roja en la acción del penalty, pero tampoco se pudo aprovechar esta circunstancia.
Hay que apuntar que a lo largo del partido el Ciudad Rodrigo gozó de otras ocasiones de peligro (como un claro mano a mano en la recta final del primer tiempo que sacó el guardameta abulense), pero le está costando muchísimo ver puerta en este arranque de temporada (lleva sólo 2 goles en 4 partidos).
Mientras tanto, el Diocesanos no tuvo ocasiones excesivamente claras frente al portero mirobrigense, Alberto De Vargas, quién ha tenido que asumir la responsabilidad de ponerse bajo palos después de que en uno de los entrenamientos de esta semana el portero titular, Pepo, sufriese una fractura del tabique nasal, que le hará pasar por el quirófano, según han comunicado desde el Club. También tendrá que pasar por allí Manu Blanco, al confirmarse que sufre una grave lesión de rodilla (se la hizo en el partido ante el Atlético Bembibre). Precisamente, los jugadores mirobrigenses saltaron al campo en la tarde sabatina en Ávila con unas camisetas para mandarle ánimos.