El catedrático de Medicina de la Universidad de Salamanca y vicedirector del Centro de Investigación del Cáncer se une a un grupo de expertos que elaborará la próxima clasificación de hemopatías malignas
El diagnóstico de una enfermedad constituye una de las fases más importantes para desarrollar la asistencia médica y seleccionar la actitud terapéutica más adecuada a cada paciente y situación. Contar con una referencia informativa que recoja los criterios comunes y actualizados necesarios para diagnosticar enfermedades, es una piedra angular de la información sanitaria, pues permite incorporar a la asistencia médica los progresos en la medicina y los avances de la comprensión científica.
Para poder llevar a cabo la próxima clasificación de las hemopatías malignas de la Organización Mundial de la Salud (OMS), este organismo internacional cuenta con una serie de comités especializados en distintas patologías que revisa y actualiza la información vigente sobre dichas enfermedades. En concreto, el comité de neoplasias mieloide de la OMS, de la que formará parte el profesor Alberto Orfao, catedrático de Medicina de la Universidad de Salamanca y vicedirector del Centro de Investigación del Cáncer (CIC-IBMCC, centro mixto de la Universidad de Salamanca-CSIC), tiene como objeto revisar la clasificación vigente de la OMS, elaborada en 2016, de las neoplasias mieloides y proponer la incorporación de los nuevos criterios de consenso, que deberán ser empleados en el futuro para el diagnóstico y clasificación de este amplio grupo de tumores. Este trabajo será recogido en la próxima clasificación de las hemopatías malignas de la OMS. En este sentido, el comité deberá actualizar los distintos criterios y subtipos y categorías diagnósticas de las neoplasias mieloides y decidir sobre la definición de nuevas entidades, es decir, subtipos de la enfermedad, y variantes de entidades diagnósticas ya existentes.
"La invitación por parte del comité ejecutivo de la OMS para formar parte del comité de neoplasias mieloides ? declara el profesor Orfao- supone un reconocimiento al trabajo de referencia realizado desde Salamanca, e iniciado en los años 70 por el profesor Antonio López Borrasca, y que ha supuesto importantes avances diagnósticos, incluyendo la definición de algunas entidades por primera vez como la neoplasia de células dendríticas linfoplasmocitoides o las mastocitosis sistémicas bien diferenciadas".
De hecho, este trabajo de investigación se ha visto reflejado en más de 700 publicaciones científicas, además de las numerosas aportaciones realizadas en el contexto del grupo español PETHEMA y de grupos europeos como son EuroFlow (Scientific Working Group de la Asociación Europea de Hematología), la European Scientific Foundation for Laboratory Hemato-Oncology (ESLHO), la European Competence Network on Mastocytosis (ECNM), o la European Leukemia Net (ELN). El trabajo también se ha traducido en el desarrollo de nuevas herramientas y estrategias diagnósticas empleadas hoy en laboratorios de todo el mundo, así como en la identificación de nuevos biomarcadores diagnósticos, pronósticos y de respuesta al tratamiento.
Reconocimiento a equipo y colaboradores
Este nombramiento supone, sin duda alguna, un reconocimiento importante a la labor desarrollada por cada uno de los miembros de su grupo de investigación y de sus colaboradores, particularmente del Servicio de Hematología del Hospital Universitario de Salamanca dirigido actualmente por el profesor Marcos González y del Instituto de Mastocitosis de Castilla-La Mancha, creado por el doctor Luis Escribano y dirigido por el doctor Iván Álvarez-Twose.
"Lógicamente ? reconoce Alberto Orfao- recibir esta invitación supone un reconocimiento importante a la labor realizada por cada uno de los miembros del grupo de investigación y de muchos otros colaboradores estrechos a lo largo de más de 30 años de trabajo, con la que me siento especialmente honrado. No obstante, soy consciente también de lo que supone la aceptación de este nuevo compromiso como una tarea adicional con la consiguiente carga de trabajo que lleva asociada, pero que asumo con mucho gusto, como elemento de prestigio para la Universidad de Salamanca y el Centro de Investigación del Cáncer en particular y para la ciudad, la región y el país en general". Sin lugar a dudas, este es un reconocimiento de un investigador que se sitúa en el 0,67 % del personal investigador con más impacto científico del mundo, como ha destacado la última clasificación elaborada por la Universidad de Stanford de los EE. UU.
Expertos mundiales
El comité está formado por un grupo reducido de expertos mundiales destacados, su perfil mayoritario es estadounidense y europeo, con experiencia en el diagnóstico de hemopatías malignas y procedentes también de áreas complementarias como son la Anatomía Patológica, la Hematología de laboratorio y clínica, citólogos, genetistas, biólogos moleculares y citometrías, entre otros. Para la clasificación de las hemopatías malignas los trabajos se dividen entre dos comités; el de neoplasias linfoides y el de neoplasias mieloides. Dentro de las neoplasias mieloides se incluyen varios grupos de tumores de los que merece destacar: la leucemia mieloblástica aguda, los síndromes mielodisplásicos, las neoplasias mieloproliferativas, los síndromes hipereosinofílicos, los síndromes mielodisplásicos/neoplasias mieloproliferativas y la mastocitosis.
Los integrantes del comité de neoplasias mieloide de la OMS mantendrán, desde el mes de junio hasta de septiembre de 2021, reuniones telemáticas periódicas, seguida, si las condiciones sanitarias lo permiten, de una reunión presencial/semipresencial a finales de septiembre en EE. UU. En dicha reunión se cerrarán los cambios a introducir en la próxima clasificación de las hemopatías malignas de la Organización Mundial de la Salud. En definitiva, estos cambios se recogerán en una publicación científica cuyas contribuciones se verán finalmente incorporadas al libro de la OMS previsiblemente a lo largo de 2022.