La poesía no se puede conseguir en el papel,
ni en la palabra,
ni en el silencio,
ni en nada saliendo de una uno con destino a una uno como un objeto material arrojado al espejo.
La poesía necesariamente (así lo dicen los preceptos
inventados aquí)
necesariamente debe encontrarse afuera siempre,
en el horizonte a lo lejos,
no al alcance de la mano, ni al de la vista, sí,
lejos,
para dejarla encarrerarse hasta nosotros.
Suzhou
Xalapa, Veracruz, México,
13 de marzo de 2021
Juan Angel Torres Rechy