"La pandemia ha condicionado el perfil de las llamadas y nos ha condicionado nuestro trabajo al impedirnos estar con la gente cerca", señalan desde el Teléfono de la Esperanza de Salamanca
La incertidumbre generada por la pandemia de la Covid-19 también tiene su reflejo en el incremento de llamadas atendidas en el Teléfono de la Esperanza de Salamanca, 2.504 durante 2020, casi un millar más que el año anterior (en 2019 se recibieron 1.567 llamadas). La "soledad e incomunicación" está detrás del 60% de las llamadas atendidas en Salamanca, uno de los 29 centros territoriales del Teléfono de la Esperanza en España. "El problema profundo de la soledad que va muy unido al vacío existencial de la persona", explica Moncho Campos, miembro del equipo coordinador de formación en el Teléfono de la Esperanza.
Las 24 horas del día durante los 365 días del año al otro lado de este teléfono siempre hay alguien dispuesto a escuchar. La necesidad de ser escuchado, lógicamente, nada tiene que ver con la edad. La mayoría de las llamadas atendidas son de personas entre los 36 y los 65 años, siendo la franja de edad entre los 46 y los 55 años la que acumula el mayor número de llamadas durante el último año en Salamanca (648). La sigue la franja de edad de 36 a 45 años, con 446 llamadas; y los mayores de 60 años, con 260 llamadas. También se han recibido llamadas de personas más jóvenes, 26 de menores de 18 años; y 88 de personas entre los 19 y los 25 años.
"Hay personas mayores que llaman y reconocen que se sienten solas, y te preguntan si vamos a estar ahí por la noche. Cuando les respondemos que sí, te dicen que ya pueden dormir tranquilas", relata Moncho Campos al respecto de ese sentimiento de soledad que, en una situación excepcional como la que estamos viviendo desde hace un año, puede acrecentarse.
Una situación que ha puesto aún más en valor la importancia de la escucha activa, "la escucha empática las 24 horas, sobre todo en problemas de crisis urgente y grave". El Teléfono de la Esperanza también lleva a cabo a lo largo del año una serie de cursos de crecimiento personal, "pero este año no se han podido realizar, y la tarea del Teléfono de la Esperanza ha quedado reducida a la escucha las 24 horas. La gente en general prefiere el contacto presencial, hablar, escuchar y ver a otras personas, esperemos que si mejora la pandemia podamos reiniciar está actividad". "La pandemia ha condicionado el perfil de las llamadas y nos ha condicionado nuestro trabajo al impedirnos estar con la gente cerca".
En el conjunto de España el Teléfono de la Esperanza atendió 160.646 llamadas en 2020, lo cual supone un incremento de 38% respecto al año anterior y 35.619 horas de atención telefónica efectiva anual -un incremento del 42% respecto a 2019-. La media de llamadas al día fue de 440 llamadas.
Este 2021, el Teléfono de la Esperanza cumple en España 50 años escuchando a las personas, a las familias y a la sociedad; más de 17 en Salamanca (se puso en marcha en 2003), siendo el voluntariado la piedra angular de una labor centrada en la escucha activa e intervención en crisis y en la promoción de la salud emocional, tan importante como la salud física.
Teléfono de la Esperanza Salamanca: 923 22 11 11