"Es importante que todo el mundo lo conozca porque cualquier vida depende de que se conozca este número", subraya Irene Cortés, directora de la Agencia de Protección Civil de Castilla y León, coincidiendo con el Día Europeo del 112
"De las pocas cosas buenas que ha traído esta pandemia es que ha puesto en el centro de la sociedad al servicio 1-1-2 y al servicio que prestan los voluntarios de Protección Civil. Definitivamente se ha entendido por qué es importante este servicio". Así lo apunta Irene Cortés, directora de la Agencia de Protección Civil de Castilla y León, coincidiendo con la celebración este jueves del Día Europeo del 112, una fecha para poner en valor la importancia de los servicios de emergencias y la labor que realizan los profesionales que en ellos trabajan. Un número de emergencias que está disponible las 24 horas del día los 365 días del año y que habremos de marcar si precisamos de atención sanitaria de urgencia, atención policial o la intervención de los grupos de rescate, salvamento o extinción de incendios.
A este respecto, tal y como subraya Cortés, "es importante que todo el mundo lo conozca porque cualquier vida depende de que se conozca este número". "Llamas al 1-1-2 y tu vida puede ser salvada, ya sea por un accidente en una montaña o que te hayas caído de la bicicleta en la ciudad, o simplemente veas que alguien está teniendo convulsiones", entre otras muchas situaciones. Y que además "sea a nivel europeo el mismo número facilita el mantenimiento de la seguridad a nivel de comunidad autónoma, a nivel de país, y de comunidad europea y es extraordinariamente útil para ayudar y para prevenir la emergencia", añade.
La pandemia de la Covid-19 lógicamente también ha afectado a la organización del servicio de Emergencias 1-1-2 de Castilla y León, sobre todo durante los primeros meses, "ya que hemos tenido que redimensionar muchas cosas". Así, por ejemplo, "hemos tenido que habilitar otras dos salas de las que teníamos, hemos desdoblado fundamentalmente por medidas Covid de distancias y de protección de los propios trabajadores, y también desdoblamos una sala que es específicamente Covid", explica Cortés.
Hasta que se habilitó el teléfono específico Covid, "entraban todas las llamadas al 1-1-2". Durante 2020 el servicio de emergencias atendió más de 1,2 millones de llamadas, disparándose solo en el mes de marzo (inicio de la pandemia) hasta las 130.197 llamadas en Castilla y León (el 15% de estas llamadas se realizaron desde Salamanca). Pese a que el volumen de llamadas "se ha incrementado" durante el año 2020, "no llegamos a colapsar nunca, porque tenemos muchos canales secundarios, pero los utilizamos todos", añade al respecto. La entrada en funcionamiento del teléfono Covid permitió además evitar las llamadas en espera.
La directora de Protección Civil destaca también que con la activación del PLANCAL (Plan Territorial de Protección Civil de Castilla y León) desde el primer día del estado de alarma (15 de marzo) "teníamos una estructura muy coordinada, con todos los niveles de colaboración (delegaciones de gobierno, diputaciones, ayuntamientos, voluntarios protección civil, sacyl...), y eso replicó en todas las provincias prácticamente desde el primer día". "Tenemos un organigrama diseñado que es muy estable y que permite movilidad en todas las provincias y eso facilitó mucho la labor a la hora de canalizar la información hacia el 112 por parte de la ciudadanía". "Cada provincia estaba perfectamente organizada", añade al respecto.
El servicio de emergencias 112 de Castilla y León cuenta con una alta valoración de los usuarios en las encuestas de satisfacción, tanto por el tiempo de respuesta como por la atención recibida. Y tras uno de los años más complicados y marcados por la pandemia del coronavirus, "hemos mantenido un nivel de satisfacción en el 97%, con lo cual creo que la respuesta ha sido bastante aceptable". "Los ciudadanos nos siguen valorando muy positivamente", destaca Cortés.