Todas las grandes ciudades tienen sus metáforas, que van cambiando como cambian ellas mismas: la Ciudad de la luz, la Ciudad Eterna, la Ciudad judía? Si Madrid es el "rompeolas de todas las Españas?", ahora habría que añadir "? y parte del extranjero", en atención a sus muchos foráneos que hacen que, por ejemplo, la Plaza de Lavapiés parezca a ratos una pequeña Yemá el Fna (Marrakesh). Y si Madrid es España, y viceversa, se la puede ver como un gran corazón que absorbe y bombea ?ahora penosamente? recursos humanos y no humanos al resto del país. Y es también un gran escenario donde se mueven, ya en clave de comedia, ya de esperpento o tragedia, sus grandes protagonistas: el Pueblo, la Corte, los Bajos fondos, los funcionarios civiles y militares? Con ese telón de fondo, un poco confuso, uno se imagina este diálogo:
- Isabel. Pásame más vacunas, Pedro.
- Pedro. Espera, Isabel, aún no han llegado de Europa.
- Jo, tú siempre fastidiando a Madrid, nos la tienes tomada. A Andalucía le habéis dado más vacunas, incluso a los separatistas catalanes .
- Pero es que tienen más población que Madrid, Isabel.
- Pues si no me das más vacunas, alargo el horario de bares y discotecas. Como les dije hace poco a los catalanes: es un delito que tengáis todo cerrado, con el clima que tenéis. En Madrid al anochecer empieza a hacer rasca, pero nos sacrificamos y salimos a la calle para sostener la hostelería y el comercio y evitar la ruina de la economía.
- No hagas eso, por favor. Tendrás aún más casos de infección y los hospitales ya no pueden más.
- Si es necesario construiré otro hospital nuevo.
- ¿Por qué no rehabilitas un hospital abandonado en vez de hacer uno nuevo? Sería más rápido y económico. Por ejemplo, el de Puerta de Hierro o el del Ifema. O el psiquiátrico de Navacerrada: allí corre bien el aire y además dicen que hay fenómenos paranormales que podrían distraer a los enfermos.
- Para anormales, bastantes tienes tú... me callo. Pero eso no mola, prefiero hacer un hospital nuevo, así la prensa puede hacerme fotos en la inauguración.
- Si sigues así al final el gobierno se verá obligado a tomar cartas en Madrid.
- ¿Lo ves? Otrra vez con amenazas. Eso sería una injerencia intolerable.
- Como quieras. Mira, haz como tú veas y espero que no te equivoques.
- Eso es lo tuyo: desentenderte de los problemas...
Creo que a Madrid, como gran urbe, le afecta más el confinamiento, que enerva e irrita a una población ya de por sí estresada, y puede provocar reacciones atípicas e incoherentes. Así, por ejemplo, aparte del caso de la presidenta, esos militares ancianos que piden otro matarile de rojos en el fondo son solo unos señoritos cabreados por no poder ir al casino o al chalet de la Sierra. (¡Ay, los cabreos sanguinarios del Madrid cavernal y facha!)
No sé si se puede interpretar así que el P.P. votara en contra del plan para distribuir el fondo europeo de recuperación económica y social, obstaculizando una ayuda que ya resulta urgente para muchos millones de españoles. O que este partido siga erre que erre con su letanía de insultos al gobierno (trilero, gafe, destructor) o que, cínicamente, señale la supuesta paja del voto de Vox y de Bildu al citado plan sin ver la viga del suyo junto a ERC y otros "indepes". (Podría decirse que unos y otros han votado en clave nacional, pero de naciones distintas). Ese voto del PP ?y de C's? en contra del plan es como dar una patada al gobierno en el culo, con perdón, de todos los españoles, incluidos los de las comunidades autónomas donde gobierna ese partido, en este caso poco español, por mucho que se recubra con la rojigualda.
Como esta conducta carece de explicación racional, me viene a la mente lo que le oí decir a un alto funcionario municipal a propósito de algunos políticos:
(Foto: Europa Press)