"Cuando mi limpiabotas invierte en bolsa, yo lo vendo todo"
J.D. Rockefeller.
Es tema de actualidad en el mundo bursátil la hazaña llevada a cabo por millones de pequeños inversores estadounidenses que han ido constituyendo, a través de la red social Reddit, una comunidad llamada Wall Street Bets que ha puesto en jaque a grandes hedge funds norteamericanos. Parece ser, o al menos así nos lo cuentan, que David ha derrotado a Goliat.
Estos inversores minoristas orquestan sus movimientos en masa para subir el precio de valores castigados, en los que los hedge funds tenían el control. Este tipo de fondos "apuestan" a la baja en valores decrépitos obteniendo beneficios de sus desplomes bursátiles. Explicado de forma muy sintetizada: su operativa consiste en tomar alquiladas acciones a un determinado precio para inundar el mercado de ventas y posteriormente, cuando el precio se encuentra muy por debajo, recomprar esos títulos a precios muy inferiores. Los títulos son devueltos a los antiguos propietarios junto con el montante acordado por el alquiler, y los hedge funds se quedan con la diferencia entre el precio de venta y el precio inferior de recompra.
El arma de doble filo para este tipo de fondos consiste en que, si la demanda de un determinado activo pasa a superar su oferta para tratar de desplomarlo y por tanto el precio sube, ellos mismos pasan a formar parte de la demanda, ya que han de recomprar para devolver esas acciones alquiladas, provocando un incremento brutal del precio consecuencia de que hasta los que "apostaban" a la baja se tienen que posicionar como compradores.
Esto ha sido noticia en los últimos días en valores como la conocida empresa de videojuegos venida a menos GameStop (GME), Blackberry (BB), AMC Entertainment (AMC), y posteriormente con criptomonedas sin fundamento ninguno, movidos por pura especulación como el Dogecoin (DOGE) o el controvertido XRP cuyos valores bursátiles se multiplicaban en pocas sesiones. Oscilando en el caso de GameStop de 20$ a 483$ en menos de 12 sesiones.
LOS INVERSORES MINORITARIOS QUE HAN ENTRADO EN ESTE JUEGO YA HAN PERDIDO
Ahora viene la realidad de todo esto, y es que la gran mayoría de pequeños inversores que han participado de estos movimientos ya han perdido, independientemente de que la operación les haya reportado ganancias o pérdidas.
Continuando con el ejemplo de GameStop, que marcaba máximos en 483$ hace cinco sesiones mientras era el centro de atención de millones de inversores noveles, cerró su cotización ese mismo día en 193$ cayendo un 60% en sólo unas horas y llegando a cotizar antes de cierre a 112$ (Un -76% desde máximos de ese mismo día). Podemos afirmar sin ninguna duda que multitud de pequeños inversores que acudieron en busca de su trozo de pastel comenzaron el día invirtiendo 10.000$ y terminaron unas horas después con 2.400$.
La otra cara de la moneda son los miles de usuarios que han visto revalorizada su inversión pasando a ser millonarios en pocos días. ¿Y entonces? ¿Por qué afirmo que todos han perdido?
Muy probablemente quienes perdieron sus 7600$ en solo una tarde sean quienes más beneficio obtengan de todo esto, ya que ha perdido un capital, pero se lleva una importante lección. Sin embargo, quien ha salido victorioso, ha obtenido una importante rentabilidad, pero una falsa creencia sobre el funcionamiento de los mercados. Estos mismos se van a encargar de hacerle sentir invencible, le harán creer que está por encima incluso de los propios mercados y que, si lo hizo en una ocasión, (más aún sin experiencia ninguna) lo podrá repetir las veces que quiera (ahora que ya sabe cómo va esto). Volverá a intentar replicar la operación asumiendo riesgos que no es capaz de percibir y cuando el mercado le ponga en su sitio se sentirá tan descolocado y traicionado por el mismo mercado que no tendrá capacidad de reacción.
El auge de casas de apuestas online y activos tan volátiles como las criptomonedas o los valores Nasdaq, sumados a los estímulos estadounidenses directamente sobre las familias, son el caldo de cultivo idóneo para generar inversores inexpertos con la mentalidad perfecta para ser víctimas de este tipo de trampas. Y es que el juego aún no ha terminado, y los grandes fondos que parecen haber sido derrotados, darán la vuelta a la tortilla antes del definitivo GAME OVER.
Las cosas han cambiado, pero podemos continuar afirmando que nadie da "duros a pesetas" y que la obsesión de todo trader ha de ser preservar su capital huyendo de quienes prometen rentabilidades millonarias. Mucha precaución con las manzanas envenenadas de magnates como Elon Musk. Cuando ellos incitan a comprar a su limpiabotas, son ellos mismos quienes están vendiendo.